Renta

Soy una ciudadana que dentro de unos días me enfrentaré a la agria tarea de hacer la declaración de la renta. No me importaría en condiciones normales, pero me siento estafada, humillada, engañada, aburrida, harta y bastantes cosas más por este Estado de bienestar de unos pocos solamente. Pero, añadido a todo esto, ahora pretenden encima que me sienta culpable si por un casual oso defraudar a Mamá Estado.

¿Pero qué juego es éste? ¿Quién está estafando a quién? ¿De una nómina congelada, de unos ahorros ridículos o inexistentes, cómo se puede engañar a la Hacienda pública? ¿Qué moral tienen estos personajes que dirigen este país, para hacer estas campañas -millonarias, por cierto- para obligarme a cumplir con el fisco? ¿Que buscan recaudar más? ¿Que paguemos más? Se les acaba la tajada y aún no han trincado todos. ¿Es eso? Es indignante, morboso y calumniante pedir cuando no se da nada a cambio, obligar cuando no se cumple. Y para remate, la justicia sigue con los ojos cerrados, que no vendados, ante tanto ladrón y corrupto que bienvive a cuenta de todos los ciudadanos. España es un paraíso, señor González, ¿verdad? Gracias por creérselo. Yo no.