123 países sellarán en Marruecos el desarme arancelario más importante de la historia

Todo en la Ronda Uruguay ha sido suspense, tira y aflojas y noches en blanco de negociaciones. Hasta que el próximo día 15 los ministros de los 123 países que en la actualidad la suscriben no estampen su firma en el paquete que condene el mayor desmantelamiento arancelario de la historia, nadie va a respirar tranquilo. Habrán sido necesarios siete años de negociaciones, dos plazos lími tes vencidos y la mano dura de dos directores generales del Acuerdo General sobre Aranceles y Comercio (GATT) -el suizo Artur Dunkel y el irlandés Peter Sutherland- para culminar este importante acuerdo.

Aunque el pasado 15 de diciembre quedó cerrada la Ronda Uruguay, gracias al acuerdo alcanzado en el último momento por Estado Unidos y. la Unión Europea de sacar de las negociaciones los capítulos más polémicos -audiovisuales, telecomunicaciones, transportes marítimos y servicios-, el suspense se ha mantenido hasta el último minuto. Un suspense que volvió de la mano de los países industrializados, concretamente de Estados Unidos que, secundado por Francia, se negaba a firmar la declaración ministerial a menos que se incluyera una cláusula contra el dumping social para evitar infrasalarios y macrojornadas laborales. Todo quedó resuelto el pasado jueves cuando el comité de negociaciones comerciales, máximo órgano de decisión de la Ronda, accedió, a pesar de la oposición inicial de los países en desarrollo, que veían esta cláusula como un nuevo intento de proteccionismo, a dejar al comité de preparación de la Organización Mundial del Comercio (OMC), -encargado de sentar las bases de funcionamiento y de fijar las competencias de la nueva organización- la puerta abierta para futuras discusiones sobre el capítulo social. Salvo imprevistos de última hora, los 123 ministros que participan en la reunión de Marraquech que hoy se inicia, se encargarán de sancionar, el mayor paquete de medidas liberalizadoras del comercio internacional jamás emprendidas.

A pesar del fracaso en la apertura de los servicios, especialmente en las telecomunicaciones, los servicios financieros y audiovisuales y los transportes marítimos, el éxito de la Ronda Uruguay radica en el enorme recorte de aranceles, cerca del 40% de promedio, y en la inclusión de la agricultura, los textiles, la propiedad intelectual, la creación de la OMC y la liberalización paralela de los mercados públicos.

Para el futuro quedan las negociaciones de los capítulos que no pudieron ser concluidos en esta ambiciosa ronda, la octava que se concluye en la historia del GATT. Tras la reunión, se reanudarán las negociaciones para encontrar una solución a las telecomunicaciones básicas y los transportes marítimos.

Otros asuntos pendientes son los subsidios, los servicios de compras de bienes y servicios, las salvaguardas, y los servicios profesionales, el turismo y los transportes. Al igual que los servicios financieros, que también se discutirán en el futuro, los audiovisuales, tras la retirada de las ofertas de Estados Unidos y la Unión Europea, quedaron sin contenido, aunque siguen incluidos en el acuerdo de los servicios (GATS). Además, del dumping social, las políticas de comercio y medioambiente, que garantizan los vínculos entre el comercio y el medioambiente así como el desarrollo sostenible deberán ser abordadas por la futura OMC.

Aumento de la renta mundial

La aplicación de estos acuerdos podría suponer un aumento de hasta el 12% del volumen del comercio mundial para el año 2025, lo que en dinero contante y sonante podría suponer 645.000 millones de dólares más (unos 88 billones de pesetas). También se prevé que la renta mundial aumente unos 250.000 millones de dólares al año una vez puestos en práctica los acuerdos. A corto plazo, sin embargo, casi nadie duda de los efectos perversos que tendrá la ronda sobre los sectores más protegidos. Además de las 450 páginas que contienen los textos jurídicos de los 28 acuerdos alcanzados en la Ronda, el paquete final también incluye las listas de productos presentadas por cada país, y que están recogidas en las 22.000 páginas anexas que alcanzan casi dos metros de altura, así como las decisiones y declaraciones ministeriales que proporcionan mayor claridad a determinadas disposiciones de algunos acuerdos.

Para todos los países, pero quizá, para los menos avanzados, uno de los logros más importantes de la Ronda ha sido la creación de la OMC, que a partir del 1 de enero de 1995 reemplazará al actual GATT, que opera de manera provisional desde 1947. Esta nueva organización será el marco institucional común para el desarrollo de las relaciones comerciales entre sus miembros en los asuntos relacionados con los acuerdos e instrumentos jurídicos del protocolo de la Ronda Uruguay.