Cada vivienda de PSV costará unas 700.000 pesetas más de lo previsto

El presidente de IGS y administrador judicial de la cooperativa PSV, Prudencio García, afirmó ayer que cada cooperativista deberá pagar entre 600.000 y 700.000 pesetas de coste adicional sobre el precio final de cada vivienda.García añadió que el plan de viabilidad de PSV necesita un aval de 8.500 millones de pesetas antes de abril, porque en caso contrario "el proyecto es inviable" y anunció que dimitirá de su puesto si no consigue esta financiación en abril.

Con ese aval, Prudencio García se compromete a finalizar todas las viviendas en un plazo de cuatro años. El plan de viabilidad de la cooperativa rechaza la segregación o escisión de las promociones, solución inicialmente barajada, al menos hasta la celebración del convenio de acreedores, cuya fecha prevista es diciembre de 1994.

El presidente de IGS reconoció que el desfase patrimonial actual es de 20.000 millones de pesetas, pero aclaró que, después de las aportaciones del Instituto de Crédito Oficial (ICO) de 9.200 millones de pesetas, se sitúa en torno a los 10.500 millones de pesetas.

García también recalcó que la gestión "imbricada" de IGS-PSV ha dificultado mucho la tarea de clarificar las cuentas de las promociones, labor que él mismo inició el pasado mes de octubre. El presidente de IGS no quiso cuantificar el dinero que UGT recibió de IGS, pero precisó que "en esa relación mediaba un contrato legal".

Por su parte, el ministro de Economía, Pedro Solbes, aseguró ayer que el comportamiento del Gobierno en el tema de la PSV "ha sido absolutamente ejemplar". Añadió que está intentando, dentro de lo posible, apoyar claramente a PSV y reconoció que el sindicato UGT quiere que el compromiso del Gobierno sea aún mayor.

El ministro para las Administraciones Públicas, Jerónimo Saavedra, criticó ayer con dureza al secretario general de UGT, Nicolás Redondo, al decir que "su jubilación va acompañada de un cierto patetisimo que, humanamente, me parece muy triste".