Un jurado declara culpables a 4 árabes por el atentado de las Torres Gemelas
Seis días después del primer aniversario del atentado que costó la vida a seis personas y que causó heridas a otras 1.000 en el World Trade Center de Nueva York (bajo las Torres Gemelas), un jurado multiétnico que lleva desde octu bre siguiendo el caso emitió ayer un veredicto de culpabilidad contra los cuatro acusados de colocar la bomba. El cargo de conjura criminal supone cinco años de cárcel, pero otros cargos paralelos (en total 11) pueden suponer la cadena perpetua.
El presidente Bill Clinton aseguró anoche que el veredicto representa "una señal muy importante para el mundo entero de que los que vienen a este país para practicar el terrorismo deberán cargar con todo el peso de la ley".Como no existen testigos directos del momento de la colocación del explosivo en pleno centro de negocios de Nueva York, el caso contra Mohamad Salameh, Nidal Ayyad, Mahmud Abouhalima y Ahmad Ajaj se ha basado en un complejo entramado de más de 1.000 pruebas científicas y 200 testigos indirectos, como dependientes de gasolineras y los encargados de un local de alquiler de coches de donde aparentemente el primero de los acusados obtuvo el vehículo en el que transportó la bomba desde el Estado de Nueva Jersey hasta el aparcamiento de las Torres Gemelas.
Ayyad, de profesión ingeniero químico, es el acusado contra quien las pruebas eran más evidentes. Aparentemente fue el encargado de adquirir los tanques de hidrógeno y productos químicos que se utilizaron posteriormente para elaborar la bomba.
Aunque el juicio se ha limitado desde el principio a estos cuatro acusados, el caso tiene un trasfondo político y emocional que ha calado muy hondo en la sociedad norteamericana. "Recuerden que no estamos juzgando creencias políticas, sino hechos", advirtió el juez al comienzo de las deliberaciones el pasado 23 de febrero.
La acusación ha conseguido que el jurado multiétnico, aunque sin judíos ni musulmanes, que debía decidir sobre el caso, considerase tan sólo los hechos que rodean a lo que se considera el más grave incidente terrorista ocurrido jamás en territorio de Estados Unidos, pero todavía hay muchas dudas acerca de las motivaciones y la financiación de las cuatro personas condenadas ayer en Nueva York.
Los ciudadanos de la ciudad han revivido en el primer aniversario del atentado, que se cumplía la semana pasada, los momentos de pánico que siguieron a la explosión. El estallido se produjo en un centro neurálgico del sistema de transporte público de la ciudad y dejó a decenas de personas atrapadas en los ascensores de las Torres Gemelas, que tienen 110 pisos de altura.
El líder musulmán ciego, nacido en Egipto, Abdel Rahman, cuya relación con el atentado no está demostrada, se encuentra en la cárcel desde junio del año pasado acusado de participar en el plan que acabó con la vida del líder radical judío Meir Kahane.
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