Justicia no respalda la reforma de la Ley de Objeción que quiere Defensa

El ministro de Justicia, Juan Alberto Belloch, no propondrá al Gobierno la reforma de la Ley de Objeción de Conciencia, en contra de la opinión de su compañero de Gabinete, el ministro de Defensa, Julián García Vargas. Belloch no quiso ayer polemizar con García Vargas, quien se mostró el martes partidario de reformar la Ley de Objeción "porque es la única de Europa que está produciendo problemas" pero dejó claro que en el plan que presentará al Gobierno no figura esa propuesta.

"El planteamiento de Justicia se reduce a pensar que es necesario articular mejor el régimen de la prestación sustitutoria y que eso supone una serie de modificaciones", afirmó Belloch.Ante la insistencia de los periodistas en conocer su opinión sobre la propuesta de reformar la ley, se escudó en que "no hay una decisión del Gobierno" al respecto y en que, cuando presente su plan de reforma, se discutirá en el seno del Consejo de Ministros. Las palabras de Belloch no sorprendieron, pues García Vargas, cuando propuso una reforma legal para frenar el espectacular aumento de los objetores, admitió que su opinión no era compartida por algún otro miembro del Gobierno.

El vicepresidente del Consejo Nacional de la Juventud de Catalunya y dirigente del Movimiento por la Paz-Asociación de Objetores, Alfred Mansó, consideró ayer "improcedente y de mal gusto que se represalie a los jóvenes objetores endureciendo el derecho a la objeción de conciencia", informa Europa Press. Esta asociación informó ayer de que la próxima semana se celebrará en Barcelona el primer juicio de España contra un objetor que abandonó la prestación sustitutoria a los nueve meses -los mismos que dura la mili- en lugar de concluir los 13 meses fijados legalmente para la prestación.

Por otro lado, 45 boinas verdes que hicieron la mili voluntaria en la Compañía de Operaciones Especiales de Palma se manifestaron anoche ante el cuartel donde están arrestados los 18 soldados que, denunciaron presuntos malos tratos en la unidad. Pretendían entregar docena y media de huevos de gallina a los jóvenes que presentaron la denuncia ante el juez.

Ana María Reverón, esposa del alférez procesado, José Diego López, salió ayer a defender a su marido. "Señores 18, rezad a Dios y que vuestras conciencias estén toda vuestra vida tranquilas", advierte en una carta pública. Ana María y las esposas del capitán y de otro alférez de la COE -no implicados en sumario-, comparecieron ante las cámaras de televisión.