Pacto por la Industria muestra pocos resultados

Sindicatos y empresarios tienen pocas coincidencias... excepto a la hora de ver falta de operatividad en el Pacto por la Industria y el Empleo, un acuerdo negociado hace un año por ellos y por el Gobierno regional con el objetivo de ayudar a las empresas en crisis.En CC OO, el responsable de empleo, Pedro Reyes, cree que el pacto tiene "efectos paliativos". "Vale, pero no basta", dice. Manuel Mariscal, de UGT, considera que el acuerdo "tiene una gestión que deja mucho de desear". Los dos sindicatos han llegado a amenazar con romper el pacto.

"No resuelve los problemas", señala Mariscal. Añade que el principal brazo ejecutor del pacto, el Servicio de Apoyo a Empresas en Crisis (Saecri), "no funciona". Este organismo es el encargado de dar el visto bueno a las ayudas económicas. En sus ocho primeros meses de vida avaló por 100 millones de pesetas a seis empresas en crisis.

Para ayudar a las firmas solicitantes, el Saecri necesita el visto bueno de Avalmadrid, un instrumento financiero de la propia Comunidad.

Es en Avalmadrid donde UGT ve los principales bloqueos. En la propia Consejería de Economía, el director general de Empleo, Juan Navarro, reconoce este cuello de botella. Explica que, en parte, se debe a la estricta normativa del Banco de España para la concesión de avales. Además, las empresas que quieran recibir ayudas tienen que demostrar un cierto grado de solvencia.

El director general de Empleo apunta una solución: "Estudiamos la posibilidad de hacer una ley de avales".

Los empresarios también son críticos con el Pacto por la Industria y el Empleo, pero menos que los sindicatos. "El pacto tiene algunos problemas. A menudo se enmaraña por culpa de la legislación, tanto europea como nacional. Habría que mejorarlo", dice Pablo Gómez Albo, de la patronal CEIM.