Japón asegura que recurrirá ante el GATT cualquier acción de represalia estadounidense
Japón negó ayer que haya vulnerado el acuerdo comercial de 1989 con Estados Unidos sobre teléfonos celulares y advirtió que protestará ante el GATT (Acuerdo General sobre Aranceles Aduaneros y Comercio) cualquier represalia comercial estadounidense. Las reacciones de los dirigentes al anuncio de sanciones fueron en general más comedidas que desafiantes para evitar una guerra comercial. El primer ministro, Morihiro, Hosokawa, que se mostró preocupado sobre las consecuencias de la crisis e insistió en la necesidad de preparar un plan de "apertura voluntaria" del mercado nacional, manifestó que "los dos países han consolidado una estrecha relación que ahora se puede romper".
Un funcionario del Ministerio de Industria y Comercio Internacional precisó, escéptico, la iniciativa de Hosokawa con estas palabras: "este es un momento difícil de la disputa en el que no hay soluciones rápidas o eficaces". En cuanto a la denuncia de Washington sobre trabas a la expansión de la empresa estadounidense de telefonía celular Motorola, que en el área asignada vendió 12.000 teléfonos contra 310.000 unidades del competidor Nippon Telegraph and Telephone (NTT), las autoridades japonesas aseguran que los resultados de la firma norteamericana han dependido de la voluntad de los compradores locales y no de supuestas maniobras de obstaculización. "Ha sido el cliente quien ha decidido si quiere una marca u otra", aseguró un portavoz de la Nippon Ido Tsushin, corporación que comercializa los aparatos de NTT y de Motorola.Las acciones de represalia anunciadas por EE UU podrían costar cientos de miles de dólares a las empresas niponas del sector de la telefonía celular. El representante norteamericano de Comercio, Mickey Kantor, aseguró que las sanciones serían por un importe equivalente al daño sufrido por Motorola. La empresa calcula que sus pérdidas oscilan entre los 250 y los 300 millones de dólares (unos 40.000 millones de pesetas) al año desde que en 1987 inició su penetración en el mercado de Nagoya.
La Bolsa, mientras tanto, reaccionó con más calma, la alarmante alza del yen respecto al dólar se detuvo y el Gobierno nipón, consciente de que Washington tiene razones para una seria irritación, evitó movimientos en falso. El índice Nikkei cerré con una ganancia de 77,51 puntos (0,41%).
Todas las declaraciones del jefe de Gobierno y de sus ministros económicos fueron cautas y ninguna de ellas fue más allá de rechazar las acusaciones efectuadas por Estados Unidos y de reiterar que Tokio elevará una reclamación ante el GATT (Acuerdo General sobre Comercio y Aranceles) si Washington decide aplicar las sanciones apuntadas el martes. "Estoy seguro de que Japón no violó el acuerdo con Estados Unidos", afirmó el primer ministro en el Parlamento, cuyos escaños más conservadores son poco amigos de concesiones.
[Un alto cargo del Gobierno japonés acusé ayer en Ginebra a EE UU de "traición" por retirar ahora algunas de las ofertas de reducción de aranceles que esta país presentó en la recta final de la Ronda Uruguay del GATT y que sirvieron para cerrar el acuerdo el pasado diciembre, informa Reuter.]
Aumento del superávit
Para agregar un nuevo elemento de crispación, el Ministerio de Finanzas informaba ayer que el superávit comercial nipón aumentó en enero hasta los 6.110 millones de dólares desde los 5.220 millones del mismo mes el pasado año, es decir, una subida del 17%. El referido a Estados Unidos subió de los 2.930 millones a los 3.130. El desequilibrio comercial que padece EE UU con Japón es el motivo por el que Washington presiona a Tokio para que abra sus mercados.A pesar de la subida del superávit el mes pasado, los economistas vaticinan una corrección a la baja en los próximos meses en la medida en que un yen más fuerte encarezca las exportaciones y abarate la entrada de importaciones.
[En Ginebra, en la sede del GATT, muchos países miembros han expresado su "preocupación por el carácter unilateral de la política comercial estadounidense", según afirma la organización en un documento que se hará público hoy, informa France Press. En este informe se señala que numerosos socios comerciales de Estados Unidos consideran "contradictorias las leyes americanas que buscan la apertura de los mercados a base de amenazas de cerrar su propio mercado".]
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.