Madrid-Texas

Texas es un grupo escocés que mantiene un intenso romance con el público español. Así, se agotaron todas las entradas para su recital, en el que se sucedieron los desmayos en una calurosa bienvenida. La inspiración de Texas viene de Estados Unidos: el blues, el country y la road music han sido, desde el comienzo, el pilar de su música con una variante fundamental para que sus canciones, de estructura añeja, subieran más alto que algunos originales de donde sacan las bases: la voz y presencia de Sharleen Spiteri, una mujer al frente de un concepto musical que ha estado dominado por hombres, si salvamos a Janis Joplin, a la que sin duda Texas profesan leal admiración. La cándida Sharleen ha convertido la premeditada intención musical de Texas en una nueva visión actualizada de algunos aspectos del rock.

. Su compañero Ally McErlaine es un erudito de las guitarras y del estilo que caracteriza el blues y el rock de donde sale su cantera creativa. Con estos tantos ganados, el reconocimiento que genera Texas finalmente les hace ser admirados por su facilidad para crear temas redondos en sus discos y hacerlos sencillos e intensos en directo. La entrega de la banda quedó patente, los cinco componentes repasaron casi al completo su tercer y último trabajo, Ricks road, repleto de fantasmas como Bob Dylan o la ya mencionada Janis Joplin, pero no olvidaron que temas como I don't want a lover o Everyday now son los que les han reclamado por tercera vez en España.

Un público heterogéneo, que estuvo atento y receptivo ante la felicidad y, sobre todo, la facilidad de la banda para llevar al escenario sus composiciones, reclamaron al término de la velada tres bises y aún hubieran recibido de buen agrado más, si hubiera sido posible. Texas dedicó el concierto a unos espectadores satisfechos con su actuación y recordaron que aunque Texas sea la capital de su música, Madrid está presente en su corazón.