Futuro sombrío
Esta mañana, aprovechando unas vacaciones, he decidido visitar Mercamadrid para conocer la gran despensa que cada día nos abastece. La sorpresa ha sido mayúscula: puerros de Bélgica, coliflores de Bretaña, patatas de Holanda, melones de Marruecos, lechugas y manzanas de Francia y ¡cebollas de Polonia!No sé si hemos llevado nuestro esnobismo a límites insospechados o es que nuestra capacidad y eficacia no alcanzan para producir ni siquiera unas tristes cebollas que sean competitivas con las de otros países.
En cualquier caso, me parece triste, muy triste, y sólo me presagia un futuro, sombrío para nosotros- Carlos de León Gutiérrez.
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