Argel ofrece a un dirigente de segunda la representación del FIS en el diálogo nacional

La Conferencia Nacional para la Reconciliación, que promueve el Gobierno argelino, ha ofrecido a, Brahim Buami, un dirigente de segunda fila del Frente Islámico de Salvación (FIS), la representación de esta organización integrista. Buami, miembro del Consejo Consultivo del FIS y líder de este partido en la localidad de Tinduf, una plaza fuerte militar con algo más de 10.000 habitantes, próxima a la frontera marroquí, parece haber aceptado, pero su representatividad no ha sido confirmada por la dirección del FIS en el exterior ni en el interior.El FIS supedita su presencia en la Conferencia Nacional al cumplimiento de cinco puntos, entre los que se encuentra la libertad de todos los detenidos políticos. Rabá Kebir, portavoz de la organización integrista en el exilio, se felicitó ayer por la decisión del Gobierno argelino de poner en libertad a varios cientos de presos integristas pero destacó que "no es suficiente". "Queremos la libertad de todos los prisioneros políticos, y sobre todo, de nuestros líderes [Abasi Madani y Alí Belhay]", declaró Kebir.

En la Conferencia Nacional, que se celebrará dentro de cuatro días en Argel, el Gobierno y la oposición tratarán de alcanzar un pacto que permita gobernar el país durante los tres próximos años y reconducirlo a la democracia.

"Perfecto desconocido"

El salto de Brahim Buami, un "perfecto desconocido", según simpatizantes del FIS, a un primer plano de la escena política ha sido recogido por varios periódicos de Argel que no profundizan en si se trata de una maniobra ni en quién está detrás de este nombramiento. La noticia ha sido recibida con sorpresa y escepticismo por una clase política que sigue con preocupación y atención los movimientos silenciosos de los máximos dirigentes del FIS y de la comisión encargada de organizar el diálogo nacional.La búsqueda de un representante de los integristas se inició hace cerca de cuatro meses, en una de las celdas de la prisión de Serkaji, conocida como la de Barbarroja, donde se estableció contacto con Abdelkader, Hachani, el artífice del triunfo electoral del Frente Islámico de Salvación en las elecciones legislativas de 1991 y miembro del Consejo Ejecutivo Provisional del movimiento.

Abdelkader Hachani rehusó la representación, de la misma manera que lo hicieron luego Mogni, el imam de Bab El Ued; Abdelbakir Saliraui, el imam exilado a la mezquita del Distrito XVIII de París, y Hachemi Sahnuni, el antiguo disidente ciego de Buzarea.

Ayer en Argel, mientras se discutía sobre el candidato a representar el FIS, se desvelaban otros dos acontecimientos importantes vinculados al movimiento islámico; en primer lugar el retorno a la prisión militar de Blida del número dos del FIS, Alí Belhay después de permanecer aislado durante un periodo de seis meses en una celda de Tizi Uzu.

El otro acontecimiento es la llamada del imam Nahnah, líder del partido islamista moderado Hamas, para unificar el movimiento integrista en un bloque que se denominaría Agrupación Islámica Independiente Con ello se constituiría un frente opositor del que quedarían excluidos los sectores duros.