Después de Castro

El miércoles 5 de enero apareció en EL PAÍS un artículo del escritor cubano César Leante, titulado Después de Castro. Al igual que el autor, nosotros, como historiadores, creemos que entender el presente requiere conocer la historia. El artículo, sin embargo está lleno de errores. Por ejemplo, se afirma que la esclavitud en Cuba se abolió a mediados del siglo XIX, cuando esto sucedió realmente en 1880.En opinión de Leante, la revolución cubana puede acabar siguiendo aquello que Cuba trató de evitar a lo largo de su historia: su colonización por parte de Estados Unidos y el predominio de la raza negra en su población. El 90% del millón de cubanos exiliados en Estados Unidos -dice- es de raza blanca. Estos exiliados no piensan regresar a Cuba tras la finalización del castrismo. En una población tan mezclada como la cubana, nos gustaría saber qué parámetros ha utilizado Leante para definir la pureza de la raza. Además, las perspectivas del autor son cuando menos contradictorias. Dice que Cuba puede convertirse en un paraíso antillano en "una más de las Antillas", lo que impili- Pasa a la página siguiente Viene de la página anteriorca el predominio de la raza negra sobre la blanca. Inmediatamente después afirma todo lo contrario: la posibilidad de un renacimiento de la "plantación en pleno siglo XX", esto es de una vuelta a la esclavitud y al predominio de la raza blanca sobre la negra. Lo más grave del artículo de Leante no son, sin embargo, sus incorrecciones y contradicciones, sino la actitud racista que muestran sus temores. Desconocer la historia es grave, más aún si uno se permite el lujo de escribir basándose en ella. Peor aún, aunque por desgracia de sobra conocido, es inventarla para justificar ciertas actitud tenidas como verdades.y 13 firmas más del Grupo América de Estudios Sociales.