La venta de empresas no logra salvar el banco
La Corporación Industrial Banesto, creada en 1990 y que reúne el grupo de empresas controlado por el banco, se replanteará ahora su futuro. La venta de las compañías más rentables, que buscaba proporcionar importantes beneficios a Banesto, se ha agotado sin lograr su objetivo último: salvar el banco.La Corporación, que nació como el primer grupo privado industrial del país -con un valor de 320.000 millones de pesetas a. precios de mercado y una facturación que superaba los 500.000 millones- ha acabado convirtiéndose en un conglomerado de entidades con poco futuro.
El plan era simple. Mario Conde quería vender en el mercado un paquete del grupo industrial del banco -el 26% de las acciones- por 85.000 millones de pesetas. La guerra del Golfo truncó. el proyecto. El 15 de septiembre de'1990, mes y medio después de la invasión de Kuwait, el valor de las acciones de la Corporación estaba por debajo de su valor contable. Fue el principio del fin.
Conde se vio forzado entonces a vender empresas sueltas para reforzar la solidez del banco. Con lo conseguido tapó durante meses las grietas de Banesto y aumentó su capitalización.La Unión y el Fénix y Petromed fueron las dos primeras empresas vendidas, en 1991. En la primera se da entrada a la francesa AGF, con un 24% del capital. En estos momentos la Comisión Nacional del Mercado de Valores estudia la operación para que AGF se quede con la mayoría de La Unión y el Fénix. Banesto ha ingresado por ello 37.000 millones de pesetas.
La segunda gran venta. fue Petromed, a la británica British Petroleum. Banesto ingresó 40.000 millones por el 36% del capital que controlaba. En septiembre de 1992, Banesto decide desprenderse de la cementera Sanson por un montante de 65.000 millones.
Durante el año 1991, la Corporación había salido sigilosamente de la papelera Sniace, aunque los ingresos por esta venta son insignificantes por la mala situación de la empresa.
En 1993 las operaciones de venta se centran de nuevo en Agromán. La pésima situación de la empresa impide que se encuentre comprador. Por el contrario, Banesto se desprende hace un mes del 32% de Acerinox, que se vende en los mercados internacionales y consigue otros 30.000 millones de pesetas. En estos momentos, otras dos empresas, Tudor y Asturiana de Zinc, se encuentran a la venta.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.