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El día 3 de enero se inicia la liquidación de la aseguradora Unial

La aseguradora de UGT, Unial, controlada al 100% por el sindicato, es otro frente abierto en el grupo empresarial creado en los últimos cinco años. El próximo día 3 de enero, según fuentes de IGS, la compañía aseguradora (con 200.000 asegurados) ingresará en la Comisión Liquidadora de Entidades Aseguradoras (CLEA), una especie de uvi creada para las compañías en malas condiciones financieras.

Unial está controlada estrechamente por la Administración desde el pasado mes de octubre, cuando la junta general de la compañía nombró como presidente de la sociedad a José María Carrió Llopis, ex director financiero del INI, economista y censor jurado de cuentas.

La sociedad, que en 1992 perdió 2.800 millones de pesetas, está en quiebra técnica. Así lo ha reconocido su presidente, José María Carrió. La liquidación de Unial, que tendrá carácter voluntario, será "ordenada" según las fuentes citadas. La CLEA garantizará los seguros obligatorios de los automóviles. Para otro tipo de primas, la CLEA responderá "en el porcentaje que marque la ley".

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Sarrió cree que la crisis de la compañía aseguradora se debe "a un crecimiento desaforado durante los años 1991 y 1992 [periodo en el que estaba al frente de la aseguradora José Ignacio López, yerno del secretario general de UGT, Nicolás Redondo]. Ha pasado de tener un volumen de pólizas de 2.500 millones en 1990 a 8.000 millones en 1992, sin tener la organización para digerir el crecimiento".

El plazo fijado para liquidar Unial se fijó en diciembre en dos meses. Pero todo se ha adelantado. El deterioro de la situación en la gestora de PSV, IGS, y en la propia cooperativa, ha acelerado la toma de decisiones.

Para evitar la liquidación de la compañía aseguradora, en la que ha habido operaciones más que discutibles, según reconocieron los gestores de IGS y del sindicato, Unial precisaba una inyección financiera de al menos 2.500 millones de pesetas. O los aportaba el sindicato UGT o los aportaba un socio interesado en la marca. Ninguna de las dos soluciones han sido posibles.

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