_
_
_
_

300.000 personas apoyan la campaña de la Ertzaintza

La llama por la paz de la policía vasca llegó ayer a su punto de destino en Gernika (Vizcaya). El Gobierno vasco, con su presidente a la cabeza, José Antonio Ardanza, salió a recibirla a los pies de la Casa de Juntas y del mítico árbol de Gernika. La plataforma de la Ertzaintza Hemen Gaude (Aquí estamos), creada tras el asesinato del sargento mayor Joseba Goikoetxea, ha recorrido 25 localidades vascas y más de 900 kilómetros. Cerca de 300.000 ciudadanos han estampado su firma en el libro Ni a nosotros ni a nadie. Ardanza agradeció la respuesta social a la iniciativa y el "apoyo y estímulo a una de las instituciones de autogobierno más importantes: la Ertzairitza".La iniciativa de la Ertzaintza contra la violencia ha calado en todos los sectores sociales. Junto a su firma, un estudiante de periodismo ha escrito: "Para que la violencia nunca sea protagonista de mi noticia". El comentario de un niño de cinco años es dramático: "No sé escribir, pero sé lo que es matar". Otra persona ha recordado: "Nací en la dictadura, crecí en el terrorismo ¿podré vivir y morir en paz?". El comentario más frecuente de cuantos han pasado por delante del pebetero con la llama ardiendo ha sido: "Quiero la paz".

El acto simbólico de ayer reunió a unas 5.000 personas. Desde primeras horas de la mañana, numerosas personas se acercaron hasta la plaza del Ayuntamiento de Gernika para poner su firma en el libro de la plataforma Hemen Gaude. El presidente del PNV, Xabier Arzalluz, destacó que la respuesta había sido "tremenda, el que la gente haya acudido personalmente a firmar. Esto no se ha visto nunca. Yo creo que ni aquí ni en ningún otro sitio. Es un aviso para los que siguen con la violencia. Cada vez la reacción es más amplia y en círculos más diferentes".

El consejero de Interior, Juan María Atutxa, pidió ayer a los terroristas y a quienes los apoyan que se tomen "Cinco minutos para reflexionar sobre el sinsentido en el que están inmersos" y que, según dijo, está llevando a muchos jóvenes vascos a un "callejón sin salida", informa Europa Press. Atutxa añadió: "ETA tiene en estos momentos un espejo en el que mirarse. Vamos a ver lo que ocurre en el Ulster, pero aquí se está haciendo un planteamiento idéntico".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_