Cuatro hombres asaltan a tiros un furgón en Valencia y huyen sin el botín

"Fue como en una película de Hollywood", afirmaron ayer fuentes de la Guardia Civil de Valencia, que busca desde la noche del sábado a los cuatro autores de un espectacular atraco frustrado a un furgón blindado de la empresa Prosegur a la salida del aparcamiento del hipermercado Alcampo de Alboraia (Valencia). Los asaltantes, armados hasta los dientes, cortaron el paso al blindado, que dio marcha atrás en medio de una ráfaga de disparos. Los atracadores desistieron del intento y emprendieron la huida en una furgoneta.

Agentes de los servicios de información de la Guardia Civil y del Cuerpo Nacional de Policía se desplazaron hasta el lugar del suceso debido a la sospecha de que los asaltantes forman parte de la organización terrorista GRAPO, que ha realizado varios atracos de estas características en los últimos años como método de financiación de sus actividades.No obstante, fuentes de la investigación afirmaron ayer que, aunque no se descarta ninguna posibilidad, 1o más probable es que sean delincuentes comunes, aunque bien organizados".

En el interior del vehículo abandonado, un Opel Kadett con matrícula de Alicante A5 101 -BK, se encontró abundante munición y varias armas. Otras fuentes afirman que también se halló un artefacto explosivo.

El furgón blindado de la empresa privada Prosegur abandonaba el aparcamiento del hipermercado Alcampo de Port Saplaya, un complejo de apartamentos y servicios en la playa de Alboraia, con la abultada recaudación del día, cuando el Opel Kadett se situó en su parte trasera y una furgoneta Volkswagen le cortó la salida. Eran poco más de las 11 de la noche y el lugar se hallaba casi desierto.

Tres encapuchados fuertemente armados saltaron entonces de la furgoneta y abrieron fuego contra el blindado. "Pensaba que era una traca, pero no eran horas", comentó ayer el propietario de un bar próximo. En medio de la ráfaga de disparos, el conductor de Prosegur pisó el acelerador y dio marcha atrás, embistiendo al Opel de los asaltantes, que quedó empotrado en un banco. Mientras, los encargados del establecimiento se apresuraron a iluminar el aparcamiento y activar "los sistemas de seguridad", según un responsable de la protección del hipermercado.

Los vigilantes permanecieron en el blindado, y los atracadores no se lo pensaron dos veces: regresaron a su furgoneta y abandonaron el lugar a toda velocidad y sin el botín. El furgón blindado "quedó destrozado por los tiros", aseguró ayer el responsable de seguridad del hipermercado de Port Saplaya, quien no precisó la cuantía de la recaudación, aunque otras fuentes la cifran en unos 100 millones.

"Sólo unos minutos"

Uno de los tres empleados de la empresa de seguridad resultó herido leve por los cristales que saltaron durante el tiroteo y fue atendido en el hospital Clínico de Valencia. El herido fue dado de alta unas horas después.El espectacular atraco frustrado, "bien organizado y planeado", duró "sólo unos minutos, todo ocurrió muy deprisa", confirmaron fuentes de la Guardia Civil, que ha alertado a sus comandancias y a la policía de varias provincias para que se sumen a la intensa búsqueda de los cuatro, tal vez cinco, delincuentes, que continúan huidos.

Los atracadores, que emplearon "armas cortas y largas" en el lugar había casquillos de escopeta-, huyeron en una furgoneta Volkswagen, también con matrícula de Alicante (A-6400-BY), añadieron las fuentes.

La Guardia Civil estudia ahora el vídeo de una de las cámaras de seguridad del establecimiento, que grabó el suceso. Responsables de la investigación explicaron ayer que los asaltantes debieron observar durante algún tiempo la recogida de la recaudación del hipermercado para escoger "un buen momento" para su acción.