La negociación del GATT entra en fase crítica a dos días de que acabe el plazo para su firma
La Ronda Uruguay atraviesa su peor crisis cuando sólo faltan dos días para que venza el plazo para su conclusión, el 15 de diciembre. Ante lo que el comisario europeo para el Comercio, Leon Brittan, calificó ayer como "serios problemas", ahora no queda ninguna duda de que los líderes políticos mundiales tendrán que intervenir para asegurar el éxito de las negociaciones. El presidente de EE UU, Bill Clinton, mantuvo conversaciones telefónicas con el primer ministro francés, Édouard Balladur; con el británico, John Major, y con el canciller alemán, Helmut Kohl.
El portavoz de Balladur que dio a conocer la conversación entre Clinton y el primer ministro francés en la tarde de ayer, atribuyó la iniciativa al presidente estadounidense, pero según Reuter, se negó a detallar el contenido del diálogo. Posteriormente, la Casa Blanca dio a conocer que Clinton también había hablado con Major y Kohl.Presumiblemente, Balladur explicó a Clinton la postura francesa en este momento crucial de la negociación. Dicha postura la resumió el titular francés de Exteriores Alain Juppé en dos simples frases: "Persisten los bloqueos" y "no aceptaremos descubrir de golpe el acuerdo en la noche del 14 al 15". Pese al bloqueo, en la madrugada de hoy se dio un nuevo paso adelante. Según France Press, los negociadores alcanzaron un acuerdo sobre las medidas antidumping.
La tensión, tras las intensas negociaciones del domingo entre el comisario de Comercio de la Unión Europea (UE), Leon Brittan y el representante estadounidense, Mickey Kantor, fue definida por el presidente de la Comisión Europea, Jacques Delors, como "psicodrama". En la madrugada de hoy estaba previsto un nuevo encuentro entre Brittan y Kantor para intentar un compromiso, improbable según los observadores, sobre el borrador del acta final de la Ronda Uruguay.
La táctica utilizada en estas negociaciones, de cruzar acusaciones y esperar al último momento para enseñar su última carta, sacó una vez más de sus casillas al responsable del Acuerdo General sobre Aranceles y Comercio (GATT), Peter Sutherland, quien en una conferencia de prensa manifestó ayer que las negociaciones "corren un peligroso riesgo" porque todavía quedan varios capítulos por resolver.
En un inusual tono nervioso, Sutherland conminó a los líderes políticos a que intervengan para que se pueda concluir a tiempo.
Capítulos pendientes
En comparación con lo que hasta ahora se ha conseguido en el paquete global, plasmado en las cerca de 500 páginas de que consta el borrador del acta final, los capítulos que quedan pendientes -audiovisual, medidas antidumping, subvenciones a la aeronáutica, textiles y servicios financieros- es "insignificante", según Sutherland, por lo que estas negociaciones "tienen que concluir de forma que puedan asistir al proceso multilateral".
El tono alarmista del comisario Brittan, que tras una larga noche de negociación declaraba que "no existe suficiente grado de consenso", contrastaba con el relativo optimismo de Kantor. "Existen un número de asuntos difíciles, pero pienso que cualquiera habría pecado de ingenuidad si creyera que al final del proceso no quedarían importantes asuntos por resolver", declaró Kantor.
Para Kantor, los problemas han aumentado, pero declinó proclamar una ruptura. A pesar de que el Consejo de Ministros comunitario solicitó el sábado excluir el capítulo audiovisual de las negociaciones, este acuerdo debería pasar por la inclusión de todos los temas que ahora están sobre la mesa. [Sobre el capítulo audiovisual, .el jefe de la delegación de la UE para los servicios, Karl-Friedrich Falkenberg reconoció que el decreto aprobado por el Gobierno español "es restrictivo", pero no añade dificultades a la negociación.]
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