Las 13 miradas del Sur
Jóvenes artistas de la periferia recrean el cinturón metropolitano
Ángel Borrego crea marcos de cuadros aprovechando la madera de un banco municipal desahuciado. Manolo Hidalgo dibuja historietas que cuentan cómo un hombre acaba viviendo en una pecera. Julio López Saguar capta imágenes M movimiento de la ciudad con su cámara. Y Mercedes García Bautista construye cajas que contienen zapatos, botes repletos de clavos y espejos sobre los que escribe poemas con carmín. Cada uno pertenece a una disciplina distinta del mundo del arte, pero todos tiene algo común: trabajan en el sur de Madrid, en la periferia.
Estos son tan sólo cuatro de los 13 artistas que exhiben sus creaciones en una exposición colectiva denominada Periferia Sur, organizada desde la consejería de Cultura de la CAM en el antiguo Museo Español de Arte Contemporáneo. La mayoría de los que participan en ella apenas llegan a los 30 años y todos desarrollan su actividad artística en localidades como Leganés, Pinto, Valdemoro o Alcorcón."En el sur no sólo hay crímenes pasionales, vaquillas que se escapan en las fiestas patronales y corruptelas políticas", dice Javier Olivares, comisario de la muestra, quejándose del escaso eco que los medios de comunicación conceden a las manifestaciones culturales en estas localidades. "La vitalidad de la periferia y la creatividad de sus artistas es ingente", afirma, "no son sólo ciudades dormitorio".
La obra de los que participan en esta exposición no se puede etiquetar. No pertenecen a una misma corriente o tendencia. La mayoría son considerados como marginales porque no encuentran espacios para sacar a la luz el fruto de su trabajo.
Así ocurre con Emilio Laut, un joven nacido en Burgos y residente en Fuenlabrada. La imagen que proyecta del extrarradio dista de la de los demás participantes. Este hombre, que se define como un "pintor colorista" ofrece una visión de Fuenlabrada alegre. Con su desordenada mezcla de colores y objetos, compone una estampa que refleja una localidad atribulada, un poco caótica, pero viva.
La belleza de lo feo
Pero entre todos los artistas que exponen, hay dos cuya obra está particularmente impregnada del entorno en el que viven. Es el caso de Rafa Martín, fotógrafo nacido en Leganés hace 32 años. Martín rastrea con su cámara el lado más feo de la realidad que le rodea, y busca la "versión no oficial" de su barrio. En su serie Paisajes urbanos, se pueden ver grandes paredes desnudas, estampas de bloques sin ventanas, imágenes en las que no aparece la gente, sino sus sombras. Este fotógrafo madrileño refleja la ausencia de espacios libres, la falta de aire y el frío.
Pero detrás de esas fotografías hay una tesis. "Yo recojo los aspectos más cutres de la ciudad, porque esa estética fea agrede a la gente y le lleva a no respetar su entorno. Cuando la gente ya no respeta lo que le rodea, entonces llega la violencia".
El fotógrafo de Leganés observa una violencia latente en los jóvenes de su barrio, que muchas veces se traduce en comportamientos vandálicos como la quema de coches, reflejada en una de las fotografías que expone en esta muestra. La obra de Pablo Luis España tampoco se puede explicar sin recurrir a Valdemoro, donde vive y trabaja. Este joven de 23 años acude a técnicas mixtas, combinando dibujo, pintura, fotografía o grafitos para expresarse artísticamente.
"Busco el misterio e intento transformar la ciudad en la que vivo, acudiendo a cosas anodinas", dice. Y muestra su entorno a través de monumentos a la evasión, laberintos y oscuros "túneles que provocan miedo". En una de sus composiciones, el artista traduce su "compromiso con el realismo dibujando la caída de un suicida sobre un mapa de Valdemoro. Para este joven artista, el sur se diferencia del resto de la Comunidad de Madrid por su duro paisaje de polígonos industriales.
"Aquí predomina el trabajo físico y embrutecedor que no tepermite ser tú mismo, que te niega el ocio", afirma. Y añade: "Yo he trabajado descargando material de camiones y se lo que es jugarse el pellejo".
Periferia sur. Hasta día 30, Museo Nacional de Antropología (antiguo MEAC, Museo Español de Arte Contemporáneo. Avenida Juan de Herrera, 2. Ciudad Universitaria). Horario: de lunes a sábado de 10.00 a 18.00 horas. Domingo: de 10.00 a 14.00 horas.
La guerra oscurece al veterano
"Los jóvenes del sur de Madrid no son heavies, y le dan menos a la litrona que los de la capital", afirma Javier Olivares, el comisario de la exposición. "Aquí, los centros culturales de los barrios siguen funcionando, cosa que en Madrid se está perdiendo", añade. Esto es, a juicio del comisario, lo que explica que un número creciente de artistas jóvenes procedan de la zona sur.Para organizar esta muestra los organizadores han elegido a 13 artistas de entre 70 currículos enviados por los ayuntamientos.
Ikella Alonso, de 22 años, es uno de los elegidos, y desarrolla su actividad en un lugar cercano al Puente de Segovia, en unos estudios donde conviven artistas y músicos. Su vecino del local de abajo es Kiko Veneno, precursor del flamenco-rock.
Pero en la exposición no sólo hay jovencitos. Aranjuez, por ejemplo, ha presentado a Pedro Maruna, que se engloba en el grupo de artistas que rebasan la treintena. Nacido en 1938 en Croacia, pero afincado en Aranjuez desde 1982, Maruna tiene ya una dilatada carrera como pintor y grabador. Sus cuadros son un monumento al color azul, telón de fondo de todas sus creaciones. Pero la guerra que está viviendo el que fue su país ha añadido un nuevo color a sus creaciones: el negro.
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