La OTAN descarta una ampliación a los países de Europa onental

La cumbre atlántica que reunirá a los jefes de Gobierno y de Estado de los 16 países socios de la Alianza los días 10 y 11 de enero en Bruselas, recordará que la OTAN es un club abierto a nuevos socios, pero no avanzará ni un sólo paso en dirección a los países de Europa central y oriental que han manifestado su deseo de incorporarse a su mecanismo de seguridad colectiva.Los ministros de Exteriores de la Alianza, que se reunirán la próxima semana en Bruselas, prepararán el terreno para esta decisión, contraria a los intereses manifestados como mínimo por Polonia y la República Checa y acorde, en cambio, con las preocupaciones expresadas desde Moscú.

La Alianza ofrecerá, en cambio, un estatuto de asociación para la paz, ideado por Estados Unidos, consistente en facilitar una mayor cooperación militar, la posibilidad de participar en operaciones de mantenimiento de la paz organizadas por la OTAN y la creación de un mecanismo de mutua consulta política. Queda excluida, sin embargo, la garantía de defensa de la Alianza.

Habrá países, por ejemplo Suecia, que podrían ser invitados a integrarse sin necesidad de entrar en esta asociación por la paz y otros, en el Este principalmente, que podrían asociarse, pero sin perspectiva alguna de ingreso en la OTAN. "Ser miembros asociados o del CECAN [Consejo de Cooperación del Atlántico Norte, que agrupa a los países del antiguo Pacto de Varsovia y a los de la OTAN] facilitará las cosas, pero no será condición para la adhesión", aclararon las mismas fuentes.Grupo de Combate

La Alianza pondrá también a punto una segunda propuesta norteamericana, el llamado CJTF (Grupo Conjunto de Operaciones de Combate), destinado a operaciones bajo mandato de las Naciones Unidas y bajo el paraguas de la CSCE (Conferencia para la Seguridad y la Cooperación en Europa). Dichas operaciones serán decididas y organizadas por los 16 socios de la Alianza, pero la participación no estará restringida a los países socios, ni será obligatoria. El Grupo Conjunto se hará cargo de operaciones de mantenimiento de la paz.

Fuentes de la Alianza consideran que la buena acogida que han tenido las dos propuestas es un síntoma de la recuperación del liderazgo norteamericano, cuestión que venía preocupando a numerosos socios, que temían un aflojamiento de los lazos transatlánticos con el presidente Bill Clinton. La cumbre de enero, y la semana próxima la reunión de los ministros, reiterarán la importancia del compromiso norteamericano en Europa, para ahuyentar así los fantasmas de un interés exclusivo de Washington por la cuenca del Pacífico y de los europeos por sus propios problemas internos, polarizados en estos momentos en el debate y entrada en vigor del Tratado de Maastricht.