El ministro de Irlanda presenta a Major un plan de paz para el Ulster

El primer ministro británico, John Major, y su homólogo irlandés, Albert Reyno1ds, se reunieron ayer en Bruselas al margen de la cumbre europea para analizar la alarmante situación por la que atraviesa Irlanda del Norte. Reyno1ds presentó un plan. en seis puntos, cuyo contenido se negó a revelar, destinado a alcanzar la paz en la conflictiva provincia. Fuentes británicas calificaron el texto de "constructivo", aunque advirtieron contra cualquier expectativa demasiado optimista al respecto.Y mientras los políticos negocian el fin de la violencia, ésta no cesa en el terreno. Ya van 16 muertos durante la semana negra que termina, los dos últimos el jueves por la noche en Lurgan (Armagh). Fue testiga de excepción de este doble asesinato una niña que celebraba su undécimo cumpleaños, y que al ver llegar por la puerta trasera de su casa a dos enmascarados creyó que eran bromistas, amigos disfrazados para darle una sorpresa. Pero en unos segundos, los dos hombres rociaron de balas la habitación. Gerard y Rory Caims, de 20 y 18 años respectivamente, católicos ambos, fueron mortalmente heridos. Su hermana pequeña, Rosin, llamó a la policía.

Los hermanos Cairns vivían en una granja situada en un área protestante y eran contrarios al sectarismo. Una prima suya, Sheena Campbell, militante del Sinn Fein, fue asesinada en octubre pasado en un hotel de Belfast.

Lurgan y sus alrededores, al sureste de Belfast, conforman el área donde opera uno de los más buscados pistoleros unionistas. Se le conoce por el apodo de King Rat (Rey Rata) y se le atribuyen seis asesinatos. El otro gran héroe del terrorismo protestante es conocido como Mad Dog (Perro Loco), se mueve por Shankill Road en Belfast y podría ser autor de cinco asesinatos.

Bomba en Londres

Mientras los dos hermanos católicos eran asesinados en Lurgan, el Ejército Republicano Irlandés (IRA) reemprendía su campaña de artefactos incendiarios en el centro del Belfast. Una librería resultó parcialmente destruida durante la noche del jueves por uno de los artilugios, oculto tras una estantería.

Por otra parte, una bomba colocada en un coche aparcado en el barrio londinense de Kensington hizo explosión en la noche de ayer sin causar víctimas, según señaló la policía. Las autoridades ordenaron la evacuación de los edificios cercanos al detectar otro paquete sospechoso cerca del vehículo destruido.

Unos 40 detectives buscan desde el sábado pasado a los autores directos del atentado del IRA en Shankill Road, y casi medio centenar intentan desarticular a las bandas unionistas. El enorme despliegue policial puede haber servido ya para detener a algún integrante de los comandos unionistas que, en los últimos seis días, han asesinado a seis personas y herido a 10.