Los alcaldes se rebelan para evitar que su deuda de 2,2 billones les lleve a la quiebra
Las continuas protestas de los alcaldes contra el Gobierno alcanzaron ayer aspectos de rebelión organizada. Los ayuntamientos se encuentran en una "situación límite" y van camino de la quiebra, según aseguró ayer enMadrid el presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), el socialista Francisco Vázquez. Los alcaldes se sienten ahogados por una deuda global que ya supera los 2,2 billones de pesetas. Paraafrontarla, reclaman un pacto de Estado y, de entrada, piden la gestión del 5% del IRPF. Buscan, en definitiva, una nueva solución para acabar con los números rojos de sus presupuestos, como se hizo en 1981 v 1983.
Barcelona, con más de un cuarto de billón de pesetas, es el municipio que tiene la mayor deuda. Es decir, que cada habitante de Barcelona debe unas 149.000 pesetas. En Madrid (con más de 100. 000 millones de deuda) o Zaragoza (más de 46.000 millones), la situación también es crítica. Los alcaldes de las siete capitales más pobladas de España se reunieron ayer en Madrid para analizar la situación. Los regidores expresaron su "justa indignación" por los problemas que sufren y lamentaron el "injusto, inadmisible y permanente olvido" del Gobierno de los problemas de la administración local.Como primera medida, los alcaldes de las siete ciudades mayores pidieron la cesión del 5%del IRPF, al margen del 15% ya acordado para las comunidades autónomas. El Gobierno, que considera poco útil esa fórmula, replicó que el saneamiento de las finanzas municipales implica que los ayuntamientos empiecen por reducir sus elevados gastos de personal.
El Estado ha tenido que acudir ya en dos ocasiones a solventar las deudas de los ayuntamientos. En 1981, el Gobierno de UCD sufragó las deudas de los municipios, cuando el de Barcelona, con 90.000 millones de pesetas y presidido por el hoy vicepresidente, Narcís Serra, era el más endeudado. En 1983,se volvió a enjugar una deuda global de 143.000 millones.
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