Ferruzzi plantea reducir a la mitad sus empleados con la venta y la reestructuración de sus empresas

El plan de saneamiento del grupo italiano Ferruzzi, amenazado por una deuda financiera que oficialmente se eleva a 25,135 billones de liras (unos dos billones de pesetas), incluye drásticos recortes de empleo y venta de empresas. De esta forma, el grupo dejará de tener responsabilidad sobre 28.000 trabajadores (19.300 que corresponderán a empresas vendidas v 8.500 a los ajustes de plantilla del resto) frente a los 63.000 empleados de 1992. Los principales bancos extranjeros acreedores de Ferruzzi rechazaron ayer las condiciones de negociación de la deuda que se incluyen en el plan.

En medios próximos a Ferruzzi se da por segura la venta de Antibióticos, la sociedad española adquirida en los años ochenta por Montedison, hoy principal filial del Ferruzzi, mediante una operación famosa que lanzó al primer plano financiero a Juan Abelló y Mario Conde, presidente Banesto. La cesión de Antibióticos es lógica, pues to que ha sido una empresa base para la división farmacéutica de la multinacional, ya casi totalmente liquidada este año. El mayor ahorro de personal (6.565 empleos) contemplado en el plan se hará con la venta de empresas químicas y farmacéuticas. Se prevé también la reducción otros 2.410 empleos en las sociedades que seguirán siendo de Ferruzzi.

La división agroindustrial, que incluye las empresas españolas Elosúa y Koipe, reducirá 1.705 empleos mediante la venta de intereses no estratégicos, y otros 3.601 por amortización de empleos. Las actividades del grupo Ferruzzi se concentrarán en la química, la agroindustria, la ingeniería y la energética. Ello implica la liquidación de casi todo el patrimonio inmobiliario del grupo y de empresas como la constructora Calcestruzzi, la televisión Telemontecarlo y el diario Il Messaggero.

El conjunto de estas enajenaciones proporcionará unos ingresos de 5,6 billones de liras, y una reducción de las cargas de otros 5 billones. El plan propone, además, a los bancos acreedores condiciones concretas de negociación para el aplazamiento de una parte sustancial de la deuda y la condonación de sus intereses.

El eje de la reestructuración será las ampliaciones de capital, por 2,91 billones de liras en el caso de Montedison y por 2,48 billones en el de Ferruzzi, que fueron anunciadas ayer por los consejos de administración. Una parte sustancial se hará por la conversión de los créditos en acciones, lo dará un papel destacado en la gestión del grupo a los bancos acreedores.

Pero al proyecto de saneamiento, elaborado por el la entidad Mediobanca, a la que la crisis de Ferruzzi le ha costado ya más de 100.000 millones de liras, le surgió anoche un obstáculo inesperado cuando un portavoz del Citibank anunció la constitución de un comité de oposición. El comité, que buscará la renegociación del proyecto, dijo el portavoz, estará integrado también por Barclay's, Credit Suisse, First Boston, Deutsche Bank y Union de Banques Suisse. Se trata de los principales bancos extranjeros acreedores de Ferruzzi.