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Fracasan los intentos de Rutskól de atraer al Ejército

Todos los intentos realizados por el vicepresidente ruso, Alexandr Rutskói, para atraer a su lado algunas unidades militares han fracasado. Así lo informó ayer el ministro de Defensa, Pável Grachov, quien subrayó también que los enviados del Parlamento a las escuelas militares de Moscú se llevaron un fiasco y ni siquiera fueron recibidos por los cadetes y oficiales.También en el interior del Parlamento, los enemigos del presidente Borís Yeltsin han tenido su primer importante fracaso en el plano militar. Los dirigentes del Comité para la Defensa y la Seguridad (Serguéi Stepashin y Yevgueni Kozhokin) firmaron, junto con otros diputados, una declaración en la que, aunque no apoyan al presidente, sí que condenan los nombramientos de los ministros paralelos de Defensa, Interior y Seguridad, hechos por el vicepresidente Alexandr Rutskói y ratificados por el Sóviet Supremo.

Grachov tiene bajo su mando a 2.218 generales, como él mismo informó el pasado mes de agosto. Y a cada general corresponden 1.262 soldados. Es decir, que las Fuerzas Armadas rusas (con su clásica división en Ejército, Aviación y Armada) están compuestas por unos dos 2.800.000. Estas fuerzas son leales a Yeltsin y en Moscú tienen destacados unos 20.000 hombres.

Reconsiderando una serie de decisiones tomadas este verano con respecto a los otros dos ministerios que tienen tropas (el de Seguridad y el del Interior), ahora se puede pensar que el golpe dado por Borís Yeltsin fue preparado cuidadosamente. Por ejemplo, a principios de agosto se apartó de la subordinación del Ministerio de Seguridad (el de menos confianza para el equipo presidencial) al grupo Vínipel, que, según los expertos, es el más importante de los que existen en Rusia para luchar contra el terrorismo.

Bajo Víktor Baránnikov, destituido por Yeltsin a fines de julio, el ministerio de Seguridad recuperó la mayoría del poder que tenía el KGB en época soviética. Así, ahora está formado por 20 direcciones y tiene prácticamente el mismo número de efectivos que duranW la desaparecida URSS. Además, Baránnikov logró que las tropas guardafronteras nuevamente se subordinaran a este ministerio.

El periódico liberal Izvestia comentó en aquella ocasión que la decisión de poner al frente de estas tropas a un militar de carrera, al que se le dio, además, el rango de viceministro de Seguridad, se debía a que el equipo presidencial no confiaba en la lealtad del citado ministerio. Por eso, "resolvió reforzar sus posiciones con un hombre leal proveniente del leal ministerio de Defensa".

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El nuevo KGB

El número de efectivos del heredero del KGB es un dato secreto, pero se puede presumir su poder por el hecho de que en la Academia del Ministerio de Seguridad, con sede en Moscú, actualmente cursan estudios 10.000 alumnos.

El Ministerio del Interior también tiene tropas, cuyo número, según las estimaciones, supera los 150.000 hombres. Ahora bien, la más importante de sus unidades armadas es la División Dzerzhinski, perteneciente al distritode Moscú. A fines de julio, el periódico Moskovsk¡ Komsomólets informó qu e el comandante de las tropas del Interior de este distrito, Arkadi Baskáyev, había sido incluido en la dirección del departamento del Interior de Moscú, que encabeza VIadímir Pankrátov, un hombre. del alcalde moscovita, Yuri Luzhkov.

La decisión, tomada a petición de Pankrátov, fue calificada de "extraña" por el diario moscovita. Y ello por su significado: las autoridades de Moscú ahora pueden disponer, si lo desean, de esta división en caso de desórdenes. Según los expertos, la división Dzerzhinski está compuesta por 20.000 hombres y tiene el potencial propio de una auténtica división de Ejército.

Además de los efectivos del Ejército y de las tropas de los ministerios del Interior y de Seguridad, el presidente puede disponer de las que posee el Servicio de Espionaje Exterior y de las Tropas de las Comunicaciones Gubernamentales, que se le subordinan directamente.

Además, Yeltsin tiene una guardia de unos 20.000 hombres. En contraste, la guardia subordinada al Parlamento, según el general retirado del KGB Oleg Kaluguin, tiene 4.000 hombres y no es seguro que todos ellos se muestren leales a Rustkói.

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