El Defensor del Pueblo pide que el Estado pague directamente las terapias no factibles en el Insalud
La Seguridad Social accede a ello en un caso "excepcional" de una joven canaria
¿Cómo puede pagar un paciente sin medios económicos una operación urgente en un centro privado, español o extranjero, cuando en la sanidad pública no existen losrecursos para hacerlo? En el caso excepcional de Lourdes Godoy, una joven canaria de 17 años, la Seguridad Social ha accedido a abonarlo directamente a la clínica, en lugar de la fórmula habitual de reintegrarel gasto al usuario varios meses después. La Oficina del Defensor del Pueblo, que ha mediado en este caso, pide que se extienda el ejemplo a todos los españoles en similares circunstancias.
Lourdes Godoy ya está bien. En mayo se le presentó una hemorragia cerebral derivada de una malformación arteriovenosa, para cuyo tratamiento, a base de "radiocirugía o embolizaciones no existían recursos apropiados en el Hospital Insular de Gran Canaria. Tampoco era posible en ese momento en otros dos hospitales públicos, el Clínico de Valencia y el Puerta de Hierro, de Madrid. El 27 de julio fue operada en la clínica madrileña de San Francisco de Asís, de carácter privado, con la autorización previa del Insalud."Fue mucho lo que tuve que caminar", relata Elvira, la madre, vecina del pequeño municipio de Santa Lucía, en las Palmas de Gran Canaria. "Primero para que mandaran a mi hija al hospital. Que si en Valencia habían desmontado el aparato; que si en Puerta de Hierro, de Madrid, tampoco podían. Después fue lo del dinero, ¿sabes? Me volví loca para buscar el dinero para mi hija".
El tratamiento completo, que va a durar casi dos años, costaba dos millones de pesetas y había que pagarlos inmediatamente. Una vez que el Insalud da su aprobación para que se realice el tratamiento, lo habitual es que el paciente adelante el dinero, que luego recupera de la Seguridad Social por el sistema de reintegro, pero con varios meses de retraso.
¿Quién no ha escuchado alguno de los frecuentes mensajes de socorro radiofónico por parte de familias que intentan reunir este dinero a través de cuestación popular? Elvira, sin recursos personales y en paro, hizo algo parecido. La pasada semana, otra joven, afincada en un municipio de Gran Canaria, consiguió reunir el dinero necesario para que se le implantaran dos brazos en un centro norteamericano, gracias a la venta de entradas de una fiesta popular auspiciada por un periódico y una emisora de radio.
Elvira sigue recordando su jacobeo particular. "Me fui al Ayuntamiento, al Cabildo Insular, al Club de los Leones, a Cáritas, a la radio, a los vecinos... Lo que he tenido que andar", repite. Para colmo, en aquella época Elvira estaba embarazada y con riesgo de un parto prematuro. En una de sus revisiones ginecológicas le dijo al médico: "Por Dios, no me deje ingresada, que tengo una entrevista con el alcalde". Llegó a reunir 700.000 pesetas. Como último recurso se le ocurrió escribir una carta al Defensor del Pueblo. En buena hora.
Abono inmediato
Responsables del Insalud en Canarias se pusieron en contacto con la clínica madrileña para asumir directamente el pago, pero el centro no estaba dispuesto a esperar meses para cobrar. Media la Oficina del Defensor del Pueblo. Interviene el Insalud desde Madrid, y finalmente se produce un acuerdo de "convalidación de factura" con la clínica, por el que se formaliza el abono inmediato.
El procedimiento de este caso ha sido calificado de "excepcional" desde el propio Insalud. En el resto de intervenciones similares se hace por reintegro de la Tesorería de la Seguridad Social, una vez superados varios trámites burocráticos, con frecuencia prolongados. Tras esta experiencia, el Defensor del Pueblo ha pedido a la Administración que extienda el sistema de pago directo en situaciones similares: "Cuando la intervención sea urgente, no se pueda realizar en un centro público y el paciente no tenga recursos económicos".
Elvira asiente: "Si la Seguridad Social no tiene un hospital para ciertos casos, por lo menos que se haga responsable de los mismos. La verdad es que nosotros somos unos pobres, y eso es jugar con la vida de mi hija y de los demás".
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