El nuevo viceprimer ministro ruso, Gaidar, anuncia una dura política de estabilización.

Yegor Gaidar, el artífice de la re forma económica rusa, anunció ayer su intención de llevar a cabo una dura política de estabilización financiera como único camino para sacar a Rusia de la crisis. El retorno de Gaidar al Gobierno en calidad de viceprimer ministro fue acogido negativamente por el Parlamento ruso, que en diciembre de 1992 había conseguido defenestrarlo como responsable en funciones del Ejecutivo y que ha apoyado una política opuesta a la de Gaidar. En los pasillos del Sóviet Supremo, la vuelta de Gaidar, a instancias de Yeltsin y del primer ministro, Víctor Chernomirdin, se interpreta como un reforzamiento del equipo reformista radical del presidente en vísperas de una nueva batalla. En la ciudad de Rostov, sobre el Don, Gaidar manifestó ayer que resulta ya imposible compaginar las dos líneas existentes en el Gobierno ruso, a saber, la que trata de poner en práctica un presupuesto deficitario y la que defiende un presupuesto basado en las posibilidades financieras reales. Según Gaidar, se ha llegado al punto en el que hay que elegir y, de seguir como hasta ahora, el déficit presupuestarlo aumentará hasta alcanzar los cinco billones de rublos al mes y la inflación puede llegar al 65% mensual. La alternativa -una "dura estabilización financiera"- es dificil pero necesaria para evitar que el sistema monetario ruso se desintegre en un plazo máximo de seis meses.Según Gaidar, se requieren serias decisiones en el capítulo de gastos estatales, en las actividades económicas exteriores y en la política de compras. Oleg Lobov, que ha desempeñado el cargo que ahora ocupará Gaidar, pasará a ocupar un puesto en la Administración presidencial, según anunció ayer el jefe del Gobierno, Victor Chemomirdin.

El guru de la terapia de choque rusa vuelve al Gobierno poco después de que la inflación haya alcanzado su cota máxima en 17 meses, el pasado agosto, con un porcentaje de crecimiento del 29%. Se registran, sin embargo, síntomas positivos, ya que el rublo lleva varios meses estabilizado en torno a los 1.000 rublos por dólar, la cosecha de cereales será buena y el ritmo de descenso de la producción industrial ha disminuido.

Acusaciones contra Yeltsin

La tribuna del Ejecutivo ruso se animó ayer con la presencia del vicepresidente Alexandr Rutskói, quien acusó al equipo de Yeltsin de conspirar para introducir un "régimen presidencial" y una "dictadura" con el fin de disolver el Parlamento. Por su parte, el jefe del Parlamento, Ruslán Jasbulátov, trató de sacar partido propio de la tendencia de reintegración que se observa en las relaciones entre Rusia y las ex repúblicas soviéticas.

Jasbulátov dijo haber dirigido un memorándum a los presidentes de las distintas repúblicas con la propuesta de transformar la asamblea interparlamentaria de la Comunidad de Estados Independientes en un Parlamento elegido por sufragio universal e inspirado en el Parlamento Europeo.

También ayer, la fiscalía de Moscú acusó formalmente a Mijaíl Poltoranin, jefe del Centro Federal de Información y un próximo colaborador del presidente Yeltsin, por falsificación y abuso de poder. De momento la fiscalía ha prohibido a Poltoranin abandonar la ciudad de Moscú.