El PNV sólo apoyará al Gobierno a cambio de ventajas fiscales durante 10 años para las nuevas empresas

El PNV exigirá hoy al Gobierno, como condición necesaria para negociar su apoyo a los Presupuestos Generales del Estado, la retirada del recurso contra la propuesta de las diputaciones vascas de obtener vacaciones fiscales por 10 años para las empresas de nueva creación. El Ejecutivo presentó anteayer dicho recurso, cuya revocación va a ser hoy en La Moncloa una de las claves de la negociación para lograr una mayoría parlamentaria estable entre socialistas y nacionalistas. El PNV exigirá también al Gobierno que asuma un compromiso autonómico, concretado en un calendario de traspasos de competencias pendientes para el País Vasco, así como una serie de medidas económicas de incentivación. Su portavoz en el Congreso, Iñaki Anasagasti, justificó ayer en Madrid el sentido de, sus demandas: "El estatuto es una ley orgánica que se debe cumplir", dijo.

La retirada del citado recurso del Gobierno será la primera condición que ponga la delegación del PNY al Ejecutivo para negociar los presupuestos. "Te invitan a una comida y previamente te meten una querella", dijo ayer Anasagasti. El recurso lo presentó el Gobierno anteayer, en última instancia, antes de finalizar el plazo.El PNV pretende conseguir, asimismo, un compromiso verbal por parte del Gobierno para alcanzar a lo largo de la legislatura el traspaso de las 54 competencias aprobadas por el Parlamento vasco, así como otras tres que los nacionalistas vascos vienen reivindicando desde hace tiempo: el Inem, la Seguridad Social y el Instituto de Crédito Oficial, conocido también como Banco Vasco.

Sobre esta última reividicación, fuentes de CIU aseguraron ayer que el deseo de crear un banco público catalán "es una decisión muy personal de Jordi Pujol". Los nacionalistas catalanes entienden que "ahora es el momento oportuno" para plantear la reivindicación dada la debilidad parlamentaría del Gobierno, informa

CiU pretende que la Generalitat cuente con representantes en los órganos rectores del Banco de España y se ampara para ello en el artículo 53 del Estatuto de Autonomía, que dice: "La Generalitat, de acuerdo con lo que establezcan las leyes del Estado, designará sus propios representantes en los organismos económicos, las instituciones financieras y las empresas públicas del Estado cuya competencia se extienda al territorio y que por su naturaleza no sean objeto de traspaso". La clave está en la caución del artículo -"de acuerdo con lo que establezcan las leyes del Estado"-, lo que remitiría al anteproyecto de ley de Autonomía del Banco de España.

La calendario de negociación con el PNV se establecerá en la ronda de reuniones que la próxima semana iniciarán en Madrid el ministro para las Administraciones Públicas, Jerónimo Saavedra, y el consejero de la Presidencia vasco, Joseba Zubía.

Compromiso verbal

El compromiso verbal será suficiente, matizó ayer Anasagasti, para que el PNV respalde los Presupuestos. La delegación nacionalista pondrá el acento en un paquete de medidas económicas. Estas condiciones se concretan en una política industrial activa, que se traduce en el apoyo a la siderurgia y a la pequeña y mediana empresa, a través de medidas incentivadoras. Dichas medidas sintonizan con las planteadas el martes por CiU, que han sido bien acogidas por el Gobierno. Asimismo, solicitarán al Ejecutivo la participación en los fondos de cohesión para inversiones en infraestructuras y medio ambiente.

"Vamos a forzar a que se pase de una política económica especulativa a una política de apoyo a las economías productivas, a la inversión en las empresas, al aumento de la productividad y a la generación de empleo", señaló Anasagasti. El portavoz nacionalista se mostró optimista porque, en su opinión, se están produciendo movimientos en esta dirección.

La delegación nacionalista estará representada por Anasagasti; el vicepresidente del Gobierno vasco, Jon Azúa; el consejero de Hacienda, José Luis Larrea, y el dirigente del PNV Juan María Ollora. Por el Gobierno y el PSOE acudirán los ministros de Economía, Pedro Solbes; Administraciones Públicas, Jerónimo Saavedra; Presidencia, Alfredo Pérez Rubalcaba; el portavoz parlamentario, Carlos Solchaga, y el dirigente del PSOE Txiki Benegas. El PNV, reconoce Anasagasti, está más cómodo sin comprometerse en un pacto de Gobierno o de legislatura: "Para Solchaga, sería ideal que entráramos en el Gobierno, pero para nosotros es un problema comprometerse con un Gobierno con escasa recaudación y obligado a votar unas medidas difíciles ante la grave situación económica".

Los nacionalistas vascos pretenden, al igual que los catalanes, una negociación gradual con el Gobierno. En una primera fase apoyarán los presupuestos si concuerdan las políticas económicas y la delegación socialista ofrece un compromiso verbal para desarrollar el Estatuto durante la legislatura. Luego, el PNV pretende negociar, desarrollo de las 54 transferencias asumidas por el Parlamento vasco, incluido el PSE-EE.