Dos madres británicas dejan solos siete niños al irse de vacaciones

La policía británica está adoptando una actitud conciliadora ante el último caso de abandono temporal de menores ocurrido en el Reino Unido. Las protagonistas del incidente, dos mujeres que comparten el mismo hogar en Surrey, al sur de Londres, se fueron de vacaciones el pasado sábado dejando solos a sus hijos: siete niños cuyas edades van desde los 10 meses a los 14 años. A partir de una denuncia a los servicios sociales municipales, la policía decidió cerrar la casa y los asistentes sociales llevarse a los niños.Las madres, cuya identidad permanece bajo secreto sumarial, insistieron ayer en que nunca abandonaron a sus hijos; pero, de momento, no se les ha permitido reunirse con ellos. En un comunicado, ambas mujeres afirman sentirse intranquilas por el incidente y afirman que desean que les "devuelvan a sus niños".

Como única precaución antes de partir de vacaciones, ambas mujeres dejaron una nota en su casa con instrucciones dirigidas a tres jovencitas canguros que regularmente cuidan a los siete niños. En ella explicaban que estarían fuera durante siete días y que dejaban dinero para gastos.

"No hemos arrestado a las mujeres", aseguró ayer el encargado del caso, el inspector Chris Drew, quien añadió que "es posible que incluso no haya caso". Según el inspector, la policía debe decidir si las medidas adoptadas por las madres para el cuidado de los pequeños son "adecuadas y satisfactorias". Si se considera que han cometido un delito de abandono, las dos mujeres pueden incluso ingresar en la cárcel. De momento, una de las canguros, de 16 años, salió ayer en defensa de las dos mujeres e insistió en que "los niños nunca han estado solos".

Este nuevo caso de niños presuntamente abandonados, el tercero del que se tiene noticia en los últimos 12 meses, ha conmocionado a la sociedad británica. "Se debe cambiar la ley para que sea ilegal dejar a niños pequeños al cuidado de personas menores de 18 años", señaló ayer Roger Singleton, director de Barnardos, una de las principales fundaciones benéficas para niños. Pero otras asociaciones identifican la escalada de casos por abandono con los recortes presupuestarios que están causando cierres de guarderías.