Alemania dedicará en 1997 el 14% de su gasto a intereses por la reunificación

La reunificación alemana comienza a dejar sentir sus efectos en el presupuesto del Gobierno federal en Bonn. En 1997, el Ejecutivo alemán tendrá que dedicar el 14% de su presupuesto tan sólo a pagar los intereses de la deuda pública, cuatro puntos por encima de lo que le cuesta este año. Los sucesivos Gobiernos de Helmut Kohl desde la reunificación alemana han seguido una política de altos déficit presupuestarios para financiar la reconstrucción de la ex RDA. La política de altos tipos de interés seguida por el Bundesbank, el banco central alemán, ha hecho el resto.Los 69.000 millones de marcos (aproximadamente 5,7 billones de pesetas) que se llevarán por delante los intereses de la deuda en 1997 representan, más o menos, la mitad de lo que se gastará ese año en Seguridad Social. Esta cifra, que aparece en un documento que ha enviado el Gobierno de Bonn al Par lamento, se hace pública una semana después de que el gabinete del conservador Kohl aprobase un recorte de 1,76 billones de pesetas en gasto social para 1994.

La creciente caída de la recaudación fiscal debido a la recesión por la que atraviesa Alemania, obliga a Kohl y a su ministro de Finanzas, Theo Waigel a cortar el gasto en todos los frentes, en un intento de frenar un déficit presupuestario que alcanzará los 67.500 millones de marcos (5,6 billones de pesetas) el año que viene.

Superar el límite

El Gobierno de Kohl ha reconocido que se arriesga a violar una cláusula constitucional que prohibe que el déficit presupuestario supere la inversión pública. Tal como está hecho el presupuesto, el déficit superará en 1994 a la inversión en carreteras, ferrocarriles, y otras infraestructuras en unos 2.700 millones de marcos (unos 224.000 millones de pesetas). Mientras que los intereses supondrán el 14% del presupuesto, la inversión pública se contentará en 1997 con el 13,1% del gasto federal. "Esto es necesario para contrarrestar el actual desequilibrio general en la economía", se afirma en el documento".Para el partido socialdemócrata (SPD), en la oposición, que la partida que más crezca del presupuesto federal sea la destinada a pagar los intereses de la deuda no se puede calificar más que de desastre.

"[Con este documento], el Gobierno demuestra su incapacidad para evitar una explosión de la deuda federal en los próximos años", según Ingrid Matthäus-Maier, la portavoz socialdemócrata para cuestiones económicas.