Hacienda ingresa 151.000 millones de pesetas menos de lo previsto en la campaña del IRPF

El Estado ingresará 151.000 millones menos de lo que había previsto por la campaña del IRPF de 1992. Mientras Hacienda había estimado que la diferencia entre los ingresos y las devoluciones se saldaría con una diferencia positiva de 61.000 millones de pesetas, los resultados provisionales hechos públicos ayer arrojan un saldo negativo para el Estado de 90.000 millones. Esta desviación se debe a que las devoluciones alcanzan la cifra provisional de 725.000 millones, en lugar de los 552.000 previstos, por lo que el Estado tendrá que devolver 173.000 millones más de lo estimado.

Los ingresos de Hacienda también se han incrementado respecto a lo previsto: las cifras provisionales arrojan una recaudación total de 635.000 millones en lugar de los 613.000 esperados, un aumento del 7,7% con respecto a los ingresos del año anterior.Pero estos 22.000 millones de más no bastan para equilibrar el incremento de las devoluciones, que representan un aumento del 11,8% con respecto a las de la campaña de 1991. La desviación entre lo estimado inicialmente y las cifras provisionales no sólo invierte el signo de las previsiones de saldo positivo, sino que supone un incremento del saldo negativo en 31.000. millones de pesetas con respecto al de la campaña de 1991, que ascendió a 49.000 millones.

Un portavoz del Ministerio de Economía justificó esta caída sobre las previsiones iniciales -que datan de mayo pasado- por "la crisis económica, que ha reducido el nivel de ingresos de los contribuyentes". No obstante, el Ministerio insiste en el carácter provisional de las cifras, ya que Hacienda no ha efectado aún el proceso de revisión sobre las declaraciones con derecho a devolución. Como consecuencia de ello, el importe. a devolver podría verse rebajado.

Mal resultado

Este mal resultado de la campaña del IRPF de 1992 se ha producido a pesar de que el número total de declarantes. (12.122.958 personas) aumentó en un 4,6% respecto a los que lo hicieron en la campaña del ejercicio precedente. Además, el número de sujetos pasivos a los que salió la declaración "a pagar" (3.769.828 contribuyentes) creció un 30% sobre la campaña de 1991.De esos casi cuatro millones de personas, un 48% optaron por el pago fraccionado. Por ello; el Estado sólo ingresó hasta junio 42 1.000 millones de pesetas. Quedan pendientes de cobro, en noviembre, otros 214.000 millones.

La declaración simplificada sigue siendo la modalidad más extendida: un 76,3% de los contribuyentes se decantó por esta posibilidad. Entre las parejas en las que los dos miembros aportan ingresos, el 50,2% se decanta por presentar declaraciones conjuntas.

Esta es la primera vez que tanto la declaración de la renta como la de patrimonio se realiza de acuerdo con la nueva ley del IRPF. El pasado mes de julio, el Gobierno decidió elevar, con efecto retroactivo al 1 de enero de este año, los tipos de contribución que habían sido inicialmente rebajados. La reforma de tipos supuso una subida de dos puntos para las rentas medias y de tres para las superiores a 6,7 millones de pesetas, además de elevar la proporción de declaraciones pos¡tivas.

Impuesto sobre el patrimonio

Respecto a la campaña del Impuesto sobre el Patrimonio, Hacienda recogió 843.000 declaraciones, un 18% menos que en la campaña de 1991, debido a la elevación del mínimo exento desde 10 hasta 15 millones de pesetas. Del total de declaraciones, 799.000 fueron positivas y 44.000 negativas, reportando unos ingresos de 82.000 millones de pesetas, una cantidad similar a la que había estimado la administración tributaria. Esa cifra representa un aumento en los niveles de ingresos por el Impuesto de Patrimonio del 8,5% respecto a lo recaudado en la campaña precedente, a pesar de que hubo 53.000 declarantes menos de los esperados.Por otra parte, la Asociación Española de Asesores Financieros y Tributarios hizo público ayer un informe sobre las declaraciones relativas al segundo trimestre de 1993 sobre el IVA. Según el estudio, sólo un 1,7% de los contribuyentes por el impuesto del valor añadido declararon adquisiciones intracomunitarias, "lo que hace presumir la escasa incidencia del comercio exterior en el conjunto de las pymes", dice el estudio.