El barbero certifica

J. V., Todos los toros que presentó Álvaro Domecq (Torrestrella) para la corrida de ayer, incluídos los tres que rechazaron los veterinarios, fueron aprobados. Uno, por decisión del presidente; los otros dos, porque el ganadero presentó certificado de que habían sido arreglados de forma legal en la finca.Los veterinarios rechazaron en el reconocimiento del martes tres torrestrellas, uno por falta de trapío, otro por sospechoso de afeitado, y un tercero por ambas cosas a la vez. Nadie les hizo ninguna observación al respecto. Sin embargo, en la mañana de ayer el presidente salvó al carente de trapío y respecto a los otros, el ganadero aportó el certificado del barbero, previsto en ese monumento al despropósito que es el reglamento taurino. En efecto, cuando un toro se estropee los pitones en el campo, se le pueden arreglar (en plata se dice afeitar), en presencia de autoridad y veterinario, que levantan acta.

De los toros de Juan Pedro Domecq previstos para hoy, los veterinarios rechazaron ayer tres, uno por falta de trapío y dos por presunta manipulación de astas, pero esta mañana se podría repetir la historia.