El nuevo Gobierno se estrenará con recortes del gasto para este año
La primera medida que tendrá que abordar el nuevo Gobierno será un recorte del gasto público. La caída de la recaudación fiscal ha hecho que Hacienda esté barajando ya varios modelos. Las últimas previsiones oficiales estiman que la recaudación por impuestos será este año inferior en 700.000 millones a lo inicialmente presupuestado (11,631 billones). Esto obligaría a reducir algunas partidas para compensar sobre todo las desviaciones en el gasto de sanidad y prestaciones por desempleo.
El Gobierno prevé que, a pesar del recorte en el gasto público, el déficit del Estado llegará en 1993 al 3% del PIB (5% para el conjunto de las administraciones públicas), frente al 2,3% previsto. Aunque la decisión final corresponderá al nuevo Gabinete, el gasto comprometido no debe superar a final de año, por imperativo legal, lo presupuestado.El problema que ahora se plantea es el de que, pese a las medidas de contención, el gasto se ha vuelto a disparar, según reconoció el presidente del Gobierno, Felipe González, a los sindicatos en la primera reunión para el pacto social celebrada el pasado lunes. Para compensar estas desviaciones será necesario reducir el gasto.
El responsable del servicio de estudios del Banco de España, Juan José Dolado, señaló ayer -en un seminario sobre la empresa y la competitividad española que se celebra en La Coruña- que el déficit del Inem se encuentra ya en los 300.000 millones de pesetas, por lo que se mostró partidario de adoptar medidas de recorte como las del pasado año. Dolado pronosticó que el paro se situará a final de ano en un 25% de la población activa.
El Gobierno pretende obtener también financiación más económica con la apertura de una línea de crédito con la banca internacional por valor de 620.000 millones de pesetas.
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