Limpiando las cuentas

El sexo ha sido la causa de la caída de muchos políticos británicos; la corrupción financiera, de realmente muy pocos. ( ... ) En 71 años, desde que David Lloyd George financió su Partido Liberal vendiendo títulos, el lodo rara vez había mancillado un partido gobernante como ahora está manchando a los conservadores. ( ... ) Una solución podría ser un acuerdo entre todos los partidos para relacionar en una lista las grandes donaciones; por ejemplo, las que excedan las 2.000 libras al año. ( ... ) Pero la experiencia americana muestra que los ingeniosos pueden evitar las normas de divulgación. ¿Qué más debe hacerse? Primero, debe ponerse un techo al gasto de los partidos. El Reino Unido ya limitó con éxito el gasto de las campañas locales. Esto ha ayudado a mantener la política británica libre de corrupción: ningún miembro del Parlamento ha comprado su escaño.( ... ) Segundo, los partidos no deberían tener que pasar la gorra por cada penique que necesiten. ( ... ) La subvención estatal limitada, como se practica en otros países europeos, tiene ventajas. Pero la financiación estatal no garantiza el fin de la corrupción, como se ha demostrado en Italia. ( ... ) En Italia la corrupción ha causado una revolución; en Japón, la caída de un Gobierno. Los conservadores dicen que el caso del Reino Unido no es ni remotamente comparable. Si tienen razón, no tienen nada que temer a abrir los libros y reformar las finanzas del partido. , 27 de junio