El alcalde cree que la orden del general Fernández-Monzón "contiene excesos"

Los escritos del inspector jefe de la Policía, Municipal y del delegado del Gobierno en Madrid han concitado la crítica incluso en sus propias filas. Mientras el alcalde de Madrid admitía ayer que la orden del general Fernández-Monzón contiene "excesos", SOS-Racismo presentaba a la prensa su anunciada querella contra Miguel Solans, a la que se han sumado seis organizaciones no gubernamentales y el sindicato CC OO.

El inspector jefe de la Policía Municipal difundió el jueves una orden extraordinaria en la que vertía algunas de sus percepciones personales tras dos meses y medio como responsable del cuerpo. Fernández-Monzón aseguraba que se había encontrado con un ambiente "viciado e intrigante" y que "lo político y sobre todo lo sindical" tenía un excesivo protagonismo en la policía. El general defendía la necesidad de dotar a los agentes de un convenio especial al margen del de los funcionarios municipales.La orden ha suscitado la polémica incluso dentro de las propias filas del Gobierno municipal del PP. El alcalde, José María Álvarez del Manzano, considera que el escrito "contiene excesos que se habían podido evitar".

Según declaró el regidor, el inspector jefe "ha expresado su opinión en una orden y él debe responsabilizarse de su contenido, en el que expresa una realidad subjetiva". El alcalde no quiso hacer más declaraciones hasta "estudiar su contenido con la tranquilidad necesaria".

Pocos minutos antes de hacer estas declaraciones, el propio concejal de seguridad, Carlos López Collado, comentaba que la orden "era poco afortunada y exagerada", aunque también matizó que le parecía "desmedida la reacción de los sindicato".

El portavoz del grupo municipal socialista, Juan Barranco, afirmó que Fernández-Monzón "tendría que ser cesado inmediatamente" si se ratifica en el contenido de la orden.

Barranco comentó: "Este señor se ha equivocado de sitio: el Ayuntamiento de Madrid no es la Acorazada Brunete ni la Brigada Paracaidista. Esto es el Ayuntamiento de Madrid, y si en el Ejército no hay funcionarios, en la Policía Municipal, sí".

Las secciones sindicales de UGT y CC OO en el Ayuntamiento de Madrid, en una nota que titulan El inspector jefe decreta el estado de sitio, asemejan el tono de la controvertida orden al de las proclamas de los militares antidemocráticos". Exigen al alcalde que si no está de acuerdo con la orden de Fernández-Monzón, le destituya.

Los sindicatos CC OO y UGT ven una clara intención de vulnerar el convenio, al dudar de la capacidad de los representantes sindicales en cuestiones de servicios, organización, destinos... y consideran aberrante que el general quiera que los sindicatos agoten sus contactos en el concejal de área.

Rodolfo Benito, secretario regional de Comisiones Obreras, ha exigido al alcalde en una carta la rectificación de la orden de Fernández-Monzón, desde el momento en que desprecia las normas democráticas, es decir, la Constitución y la Ley Orgánica de Libertad Sindical.

También la Confederación Sindical Independiente de Funcionarios (CSI-CSIF) y el Colectivo Profesional de Policía Municipal han contestado al general en sendos comunicados en los que redundan en la incorrecta interpretación que ha hecho de la labor sindical.