El montaje de 'Lulú', de Wedekind, se estrena en Madrid sin director

Lulú o La caja de Pandora, de Frank Wedekind, llega por primera vez a los escenarios españoles de la mano de la actriz y empresaria Victoria Vera. Durante cinco años, ha recorrido todos los despachos imaginables con el libreto bajo el brazo, y el mismo día que consiguió estrenarla en Alcalá de Henares (el pasado 8 de mayo), el director que la actriz eligió para el montaje, Joaquín Vida, abandonaba el proyecto. Hoy llega a Madrid y se presenta en el teatro Albéniz.

"Alguien tenía que afrontar el problema y tanto yo como la compañía, que ha asumido con gran solidaridad la ausencia del director, hemos abordado el espectáculo y por ahora estamos muy contentos, dado el éxito que estamos teniendo", afirma Victoria Vera antes del estreno de Lulú en Madrid.Joaquín Vida desaconsejó el estreno de Alcalá de Henares, cinco semanas después de iniciarse los ensayos. "Hubo un empeño en cortar la obra de una manera insostenible si se quería respetar al autor y me fui del proyecto", dice Vida. "Si alguien quiere hacer dos duros textos alemanes, no puede meter tijera para convertirlos en una comedia de situación española". Por su parte, la actriz argumenta que Vida quería hacer un montaje de tres horas basado en el distancia miento alemán y ella ve la obra como un drama de finales del XIX. "Hemos pensado sobre todo en el público, y ahora el texto dura unas dos horas", dice.

La obra es conocida en España por las puestas en escena de la ópera del mismo nombre de Alban Berg, pero nadie en nuestro país la ha visto representada como la creó su autor. Lulú está compuesta por dos obras: El espíritu de la tierra y La caja de Pandora -este último título es el elegido por Vera-. Aunque fueron estrenadas en años diferentes, Wedekind reconocía que no tienen sentido la una sin la otra. "Siempre me ha sorprendido que en España no se conociera este personaje lleno de pasiones, de contradicciones, en el que entran en litigio la razón y el instinto, una Lulú que es al mismo tiempo víctima y verdugo, y ninguna de ambas cosas, terrena y aérea", dice Victoria Vera.