Estados Unidos provoca un escándalo al intervenir en los comicios bolivianos
El embajador de Estados Unidos en Bolivia, Richard Bowers, provoco un escándalo al entrometerse en las elecciones generales del próximo domingo. El diplomático exigió que el Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR), el partido del presidente saliente, Jaime Paz, retire de las listas de candidatos a diputados al ex ministro del Interior Guillermo Capobianco, al que acusa de vinculaciones con el narcotráfico.
En la recta final de las elecciones para presidente y Parlamento, políticos de todas las tendencias consideran esta intervención como un atentado contra la soberanía nacional.La pelea entre la Embajada norteamericana y Capobianco se remonta a hace más de dos años. En marzo de 1991, una declaración del entonces embajador de EE UU, Robert Gelbard, hoy segundo en el Departamento de Estado, encargado de América Latina, provocó la dimisión de Capobianco de su cargo de ministro del Interior. Ante la acusación norteamericana de haber recibido dinero de narcotraficantes, Capobianco optó por no ser una carga para su amigo, el presidente Paz. El embajador Gellbard llegó incluso a declarar que le había retirado el visado para EE UU a Capobianco por su presunta vinculación con narcotraficantes.
Capobianco no es un político cualquiera, sino que estaba considerado el tercero en la jerarquía del MIR, detrás del presidente Paz y de Óscar Eid, el jefe nacional del partido. Capobianco pertenece al grupo inicial de compañeros que fundaron el partido y que se encontraron en la Universidad7 Católica de Lovaina, en Bélgica, donde estudiaban y soñaban con un futuro revolucionario para Bolivia. Al llegar el MIR al Gobierno en 1989, gracias al apoyo de su anterior enemigo, el ex dictador el general Hugo Banzer, Capobianco ocupó directamente la cartera de Interior.
El conflicto ha estallado ahora de nuevo con especial virulencia cuando sólo faltan tres días para las elecciones. El MIR de Santa Cruz, donde Capobianco cuenta con apoyo entre las bases, le colocó en las listas de diputados del Acuerdo Patriótico. Bajo este lema, se presentan unidos el MIR y la Acción Democrática Nacionalista (ADN) de Banzer, candidato presidencial del Acuerdo Patriótico.
El embajador Bowers, en una carta a Eid, asegura sentirse "muy afectado y aterrado" al ver á Capobianco en las listas de candidatos a diputados y acusa al MIR de "memoria política extremadamente débil. No logro comprender el afán de ustedes de elegir a un político con conexiones bien conocidas con el narcotráfico". En otro pasaje de la misiva, Bowers asegura: "El Gobierno de Estados Unidos ciertamente no ha olvidado al señor Capobianco". Y concluye: "Espero que usted y el MIR tomen las acciones necesarias para que el señor Capobianco renuncie a su candidatura".
Capobianco ha respondido al embajador que no piensa renunciar. Tampoco el MIR accede a retirarle de las listas de candidatos. El presidente Paz se lava las manos y trata de no implicarse en el conflicto.
El candidato presidencial más fuerte de oposición al Acuerdo Patriótico, Gonzalo Sánchez de Lozada, del Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR), calificó "lo de Capobianco" como "una vergüenza para Bolivia, porque con eso se cae en la dependencia y el sometimiento".
