La familia de Anabel Segura apela a la "humanidad" de los secuestradores

La familia de Anabel Segura, la estudiante de 22 años secuestrada en La Moraleja, apeló ayer a la "humanidad" de los secuestradores para que no maltraten a su víctima. A cambio, los padres ofrecen su ayuda para impedir "incluso que vayan a la cárcel". Tras seis semanas de cautiverio, Rafael Escuredo, portavoz familiar, informó ayer de que el padre de Anabel tuvo que hipotecar su casa para pagar el rescate.

Escuredo dijo también que hubo una cita para pagar el rescate, a la que no acudieron los secuestradores, y aclaró que éstos no se pusieron en contacto con la familia por vez primera hasta dos días después del rapto, lo que hizo inevitable que la policía investigase el caso.El pasado lunes 12 de abril, el jardinero de un colegio de La Moraleja vio cómo unos hombres forzaban a una chica que hacía footing para que entrara en una furgoneta. Lo denunció en la comisaría de Alcobendas. Horas más tarde, el novio de Anabel Segura, estudiante también de cuarto curso de Ciencias Empresariales Europeas, acudió a la misma comisaría para denunciar que su novia había salido a correr horas antes y no había regresado a casa.

Los funcionarios pidieron fotos de la mujer para identificarla. Los padres de Anabel volvieron de sus vacaciones en Andalucía. El 14 de abril por la noche fue cuando los secuestradores llamaron a la familia para informarles de que se trataba de un secuestro. La duda que se plantea la policía es si aquella llamada se produjo momentos antes o después de que la desaparición de Anabel Segura se anunciase en Antena 3 Radio. Si ocurrió después, los secuestradores podrían no ser tales. No obstante, los agentes creen que se trata de un secuestro en toda regla.

La familia, en cualquier caso, ha apelado a la humanidad de los delincuentes. Si éstos fueran detenidos tras recibir los 150 millones que piden, la familia se compromete a ayudar para evitar "incluso la cárcel" si no maltratan a Anabel, según indicó Escuredo.

Errores muy graves

Un alto responsable policial indicó que la detención de este grupo se producirá tarde o temprano y la condena dependerá en giran medida del comportamiento que mantengan con la víctima.

Las mismas fuentes aseguraron que los secuestradores cometieron errores muy graves desde el primer momento. "El secuestro ocurrió delante de un testigo que denunció el hecho a la policía, y los secuestradores, conocedores de este extremo, tardaron tres días en comunicarse con la familia. Da la sensación de que estaban interesados en que la policía tuviera conocimiento de sus actos. Me parace un craso error, y no será el único que cometan".

En cuanto al posible pacto entre la familia y los secuestradores, el responsable policial indicó que será respetado siempre y cuando no medien malos tratos y otras vejaciones con la víctima. "En ese caso", indicó, "pasará a ser un delito contra las personas, cuya pena dependerá de la crueldad de sus verdugos".

Rafael Escuredo recordó ayer que los secuestradores llevan tres semanas sin ponerse en contacto con la familia. "Yo estoy dispuesto a hablar desde donde ellos quieran: una cabina, un bar..., donde deseen; cualquier sitio es bueno con tal de que me dejen hablar, porque siempre cuelgan rápidamente, antes de que yo pueda decir nada".

El abogado dijo que Anabel Segura no es la típica niña tonta de alto nivel adquisitivo y que su padre no es el típico rico. "Hasta tal punto es así, que los 150 millones de pesetas que le han pedido los reunió hipotecando la casa y con la ayuda de muchos amigos. La familia no para de llorar ni un minuto, la situación es insostenible. Todos viven sólo pendientes del teléfono", concluyó Escuredo.