La cumbre de la UEO concluye con el acuerdo para controlar el embargo a Serbia en el Danubio
La cumbre romana de la Unión Europea Occidental (UEO), última prevista bajo la presidencia italiana de la organización continental de defensa que concluye en julio, fue clausurada ayer con la firma de los tres memorandos que permitirán el despliegue de fuerzas en el Danubio para controlar el cumplimiento del embargo contra Serbia. La medida refleja la "línea de firmeza" europea ante el conflicto de la ex Yugoslavia, según expresión de] ministro italiano de Defensa, Fabio Fabbri.
Beniarnino Andreatta, ministro italiano de Exteriores, recordó en la conferencia de prensa final de estas sesiones que, como se decía en el comunicado aprobado por los ministros al término del consejo celebrado el, pasado miercoles, "siguen abiertas todas las opciones, desde las sanciones hasta la intervención militar". Esta última perspectiva, añadió el ministro, resultaría más probable "si alguna unidad de la ONU se viera implicada en los combates".
Andreatta pidió también a los serbios de Bosnia -cuyo pronunciamiento en referéndum contra el plan Vance-Owen ha sido considerado "nulo de hecho" e "inexistente a todos los efectos" por el consejo ministerial de la UEO- una señal inmediata de "buena voluntad". En concreto, el ministro italiano confió en que "en los próximos días" los serbios de Bosnia se retiren de las zonas sobre las que no tienen reivindicaciones históricas, pero que han ocupado durante el conflicto.
La cumbre romana de la UEO ha reafirmado el empeño en la aplicación del plan ance Owen como una propuesta global razonable de salida pacífica del conflicto, y ha acogido con explícito interés las propuestas del ministro ruso de Exteriores, Andréi Kózirev, para reactivar la puesta en marcha del plan señalado.
Ayer, los ministros europeos discutieron el conflicto de la antigua Yugoslavia con sus homólogos de Bulgaria, Rumania, Polonia, República Checa, Eslovaquia, Hungría y los tres países bálticos,Lituania, Letonia y Estonia.
En ese foro de consultas centroeuropeas que la UEO quiere refórzar -paralelamente a las ya institucionalizadas con otros países, como Finlandia, Grecia o Turquía, que aspiran a entrar en la organización- se firmaron los memorandos relativos al Danubio.
Los acuerdos firmados ayer autorizan el despliegue de unidades navales -entre ellas, de una patrullera de la Guardia Civil del Mar- y sus correspondientes efectivos humanos -incluidos unos 50 guardias civiles- para realizar en el Danubio funciones de control similares a las que las flotas de la UEO y la OTAN vienen realizando desde hace meses en el Adriático.
Los países ribereños facilitarán, además, las instalaciones y ayuda técnica precisas para esta misión, sobre cuyo carácter "humanitario" insiste la UEO. "Si algún país sufriera una acción agresiva como consecuencia del, apoyo que presta a las operaciones realizadas bajo el mandato de la ONU, tal ataque interesaría directamente a la comunidad in ternacional", se advierte en el comunicado emitido ayer como conclusión de los encuentros.El mediador David Oweri, tras entrevistarse ayer con el presidente de Ucrania, Leonid Kravchuk, declaró que su plan de paz "no está muerto", en respuesta a las declaraciones que el dirigente de los serbios de Bosnia ha efectuado. El mediador británico añadió que "los paises occidentales y de la OTAN están interesados en ampliar la presencia de los países de Europa del Este en la misiones de mantenimiento de la paz
Por otra parte, la tregua acordada el pasado martes entre serbios y croatas en la región de Krajina no se firmó ayer como estaba previsto. El representante militar serbio no se presentó.
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