El juez Belloch pide un debate sereno sobre las agresiones a la libertad sexual
El magistrado y vocal del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Juan Alberto Belloch, propuso ayer un debate profundo y sereno sobre los delitos contra la "libertad e integridad sexual", que permita un análisis sin prisas alejado de la influencia de desgracias como la de las tres niñas de Alcásser. Belloch aseguró que no conceder permisos a los presos sería como "construir seres verdaderamente peligrosos" y que habría que considerar esos permisos como "un derecho de la sociedad a disminuir el riesgo de su puesta en libertad", una vez cumplida la pena."Desgraciadamente, es muy frecuente operar en función de las tragedias que se publicitan", declaró ayer Belloch durante unas jornadas organizadas por el Instituto Vasco de la Mujer sobre los Delitos contra la libertad sexual: Violación y agresiones.
El vocal del CGPJ propuso, en cambio, un debate sosegado de todos los sectores especializados, e introdujo la idea de que uno de los baremos para establecer las penas por ese tipo de delitos sexuales sea "el daño físico, sicológico infligido a la víctima".
El juez Belloch dió como probado que la peligrosidad de los delincuentes disminuye en función de su progresivo acercamiento a la libertad mediante los permisos. Y agregó: "Si mantuviéramos las penas completas, sin permisos, cuando esa persona saliera a la calle sería verdaderamente peligrosa".