800 operaciones financieras con "narcopesetas"
Las implicaciones de la banca en la trama desmantelada en la operación Pitón se extienden a la península, como la sucursal del Banco Central de Chipiona (Cádiz), a través de la cual Alfonso Monge Castro ingresó más de 500 millones. Varios de los ingresos en moneda extranjera -alguno de los cuales supuso 38 millones- se documentaron en concepto de turismo."Por parte del Banco Central o de los responsables de su sucursal en Chipiona se han dado, presuntamente por actitudes negligentes o colaboracionistas, las facilidades necesarias para que Monge realizara operaciones bancarias más que sospechosas, lo que le ha permitido operar con toda impunidad, no sólo en operaciones de ingreso, sino de pago a través de sus cuentas corrientes", según Vigilancia Aduanera.
"Sorprende que las posibles auditorías del Banco Central no hayan detectado estos movimientos significativos de capital, siendo Alfonso Monge Castro, con su hermano José, quizás los más importantes clientes en esta sucursal", según informes del SVA.
El director de esta sucursal, José Antonio Lorenzo Bretón, ya detenido en diciembre de 1991, mantuvo muchas actuaciones irregulares consistentes en que no realizaba comprobaciones de caja; no visaba los documentos y asesoró a Monge en operaciones de inversión y especulación inmobiliaria.
Pero los capos de la red de narcotraficantes no se limitaron a cobrar dinero blanqueado. También invirtieron en negocios inmobiliarios. El peinado hecho por funcionarios del SVA en cientos de notarías de Andalucía -excepto Almería y Jaén-, más Ceuta y Melilla, ha descubierto que esta red promovió 800 operaciones inmobiliarias con sus narcopesetas.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.