_
_
_
_

España, alto nivel de riesgo

Un país con 6.000 kilómetros de costa resultaría seriamente afectado si el nivel del mar sube 60 centímetros o un metro en el próximo siglo. España es ese país, y el impacto de la elevación de las aguas, que afectarían dramáticamente a extensos territorios como las marismas del Guadalquivir o el delta del Ebro, es una de las primeras preocupaciones que resaltó en Ginebra Antonio Labajo, subdirector del Instituto Nacional de Meteorología (INM), al resumir los impactos que el cambio climático tendría en la Península.También explicó que el desplazamiento de las fronteras climáticas hacia latitudes altas, tal y como predicen los centros científicos más importantes del mundo, sería crítico para un país como España, que está justo en el límite entre las zonas húmedas europeas y el clima subtropical sahariano. "La precipitación es una de las variables más complejas de estudiar, pero las predicciones indican sequía en el futuro", explicó Labajo refiriéndose a España. "Podrían no cambiar las precipitaciones medias, pero sí la estructura de las mismas. En lugar de llover 400 litros por metro cuadrado en 100 días en el sureste español, tal vez las lluvias se concentrasen en cuatro días, lo que sería muy grave", continúa. Este delegado español subraya que los científicos aún tienen incertidumbre respecto al cambio climático, pero afirma que todos los países aceptan las conclusiones de los investigadores del Panel Internacional Sobre Cambio Climático (IPCC) y que esas incertidumbres no pueden demorar la toma de medidas.

Más información
La cumbre del clima resalta la creciente eficacia de las predicciones e intenta coordinarlas

España tiene previsto incorporarse rápidamente a la lista de 50 países que ya tienen un programa nacional del clima para avanzar en la investigación, estudiar con detalle la sensibilidad de su territorio al cambio climático y proponer medidas preventivas, por zonas, ante su impacto.

La Comisión Nacional del Clima, siguiendo las recomendaciones del IPCC y del Programa Mundial del Clima, está ultimando el programa español, cuyos borradores no se han incorporado a los documentos de debate de la reunión de Ginebra por haber llegado tarde al comité organizador. Labajo y Jesús Merchán, también del INM, han explicado en la reunión que más de 80 expertos españoles de 20 instituciones de la Administración y universidades están participando en la elaboración del programa nacional.

Dos comités -uno científico y otro sobre el impacto y estrategias de respuesta- articulan la preparación del PNC. En el primer capítulo, Labajo señala que los investigadores españoles, en coordinación con los mejores centros europeos de estudios del clima, se centrarán en la predicción regional para la península Ibérica. El INM ha adquirido recientemente un superordenador Cray-C94 -la gran potencia de cálculo es imprescindible para estos estudios- que se dedicará tanto a la predicción a medio y largo plazo como al pronóstico a muy corto plazo (meteorológico).

La comisión de impacto y estrategias estudiará la repercusión en áreas concretas como los asentamientos de población, los transportes, las zonas costeras, los bosques y agricultura, los desastres naturales o la industria y energía.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_