_
_
_
_

Muere un voluntario japonés de la ONU en una emboscada de los 'jemeres rojos'

Un voluntario japonés del contigente de las Naciones Unidas en Camboya y su intérprete fueron asesinados el jueves en una emboscada atribuida a los jemeres rojos, la misma guerrilla que el martes amenazó con el empleo de la violencia para boicotear las elecciones generales de mayo. La muerte de Nakata Atsuhito, de 25 años, primera víctima nipona en un país todavía en guerra pese al acuerdo de paz de París, se produce pocas horas después de que el secretario general de la ONU, Butros Gali, manifestara su esperanza en la superación del actual clima de violencia.

El portavoz del Gobierno de Tokio aseguró que Japón mantendrá sus compromisos y el destacamento de ingenieros desplazado el pasado año a la conflictiva nación del sureste asiático.Un total de 104 personas, en su mayor parte vietnamitas, perdieron la vida el mes pasado en una sangrienta sucesión de matanzas y atentados. Cuatro eran cascos azules.

La milicia maoísta responsable de la muerte de un millón de camboyanos durante sus tres años de gobierno eligió en esta ocasión un blanco sensible. El envío de 600 zapadores nipones a Camboya fue precedido de una viva polémica parlamentaria, ya que la Constitución japonesa prohíbe el despacho de tropas en la solución de disputas internacionales. La Cámara aprobó una disposición que autorizaba con carácter extraordinario la participación nacional en la fuerza pacificadora de las Naciones Unidas. Sus efectivos militares fueron desplegadas en una de las provincias alejadas de las bases controladas por los jemeres rojos para evitar su hostigamiento.

Emboscada

La emboscada contra Nakata Atsuhito se produjo en la provincia central de Kompong Thom. Su automóvil fue ametrallado en un camino vecinal. Los dos ocupantes murieron alcanzados por los disparos. Atsuhito trabajaba en una organización de voluntarios, con base en Ginebra, que colabora habitualmente en las misiones humanitarias de la ONU.Un funcionario de la UNTAC reveló que Atsuhito había pedido protección para él y su equipo debido a las peligrosas condiciones de trabajo. Los grupos electorales están integrados por 600 personas, 35 de ellas japoneses. Su actividad es determinante: informan a los camboyanos sobre la importancia de los comicios para el futuro de su país y el procedimiento a seguir el día de la emisión del voto.

Los jemeres rojos se oponen a la celebración de la consulta por estimar que todavía per manecen en Camboya, camuflados en el Ejército, el Gobierno y la Administración, o entre el campesinado, vietnamitas que participaron en la invasión del país en 1978. Las tropas vietnamitas fueron repatriadas diez años después de haber expulsado del poder a los jemeres rojos y colocado en su lugar un Gobierno aliado de Hanoi, el actual. La UNTAC asegura no haber podido comprobar la penetración denunciada por la guerrilla.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

El secretario general de la ONU, Butros Gali, que hoy concluye una visita de dos días a Camboya, afirmó que los cascos azules no se dejarán intimidar por la violencia. "Les aseguro que adoptaremos las máximas precauciones para garantizar el máximo de seguridad al pueblo de Camboya en el proceso hacia la solución de sus problemas".

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_