La centrista Simone Veil, 'vicepresidenta' en la práctica

Simone Veil ocupa el primer puesto político y protocolario del nuevo Gobierno francés detrás de Edouard Balladur. La infatigable combatiente europeísta, la adalid de los derechos humanos, la militante feminista, la superviviente del campo de exterminio de Auschwitz, ocupa el primer lugar en la lista de los cuatro ministros de Estado del Gabinete y es la titular de tres carteras: Sanidad, Asuntos Sociales y Ciudad. Eso la convierte en la vicepresidenta en la práctica de Balladur.La presencia en tan destacada posición de Veil en el equipo formado a raíz de la abrumadora victoria del centro-derecha en las legislativas, tranquiliza a los que se inquietaban por sus posibles tendencias antisociales y antieuropeas. Los más derechistas tendrán que pasar por encima del cadáver de Veil para imponer sus tesis.

Al formar su Gabinete, Balladur ha dado prueba de su capacidad para integrar las múltiples sensibilidades de la coalición de centro-derecha que los pasados días 21 y 28 humilló electoralmente a los socialistas. Balladur no podía prescindir de la poderosa corriente derechista y antieuropeísta que encarna el gaullista Charles Pasqua, pero ha dedicado al político corso a lo que sabe hacer muy bien: mantener el orden. Además, Balladur ha subrayado que Veil ocupa un puesto protocoloriamente más importante. Y tratándose de Balladur, el protocolo es sagrado.

"Conciencia progresista"

Veil, de 65 años, casada y con tres hijos que ya le han dado nietos, es la "conciencia progresista" del nuevo Ejecutivo. El currículo de esta pionera es impresionante: fue la primera mujer ministra en la historia francesa, la introductora en su país del derecho al aborto y la primera presidenta del Parlamento Europeo. Desde hace dos décadas figura sistemáticamente en los primeros lugares de las encuestas de popularidad en Francia. Sabe conjugar su aspecto maternal con una acerada mirada verde.Hija de un arquitecto judío, Veil nació en Niza en 1927. En 1944 fue deportada por los nazis al campo de concentración de Auschwitz. Ella pudo regresar, pero no sus padres y su hermano. Desde entonces la flamante ministra de Estado lucha contra cualquier concesión a la ultraderecha por parte de sus propios socios políticos. Su nombramiento por Balladur aísla aún más al Frente Nacional.

Licenciada en Derecho y Ciencias Políticas, Veil comenzó a trabajar como magistrada consagrada a la mejora de las condiciones de vida de los presos. En los años sesenta creó en su casa una célebre tertulia frecuentada por gaullistas y centristas, pero sólo se decidió a entrar en política en 1974.