El rock y la lírica
"Me di cuenta de que el único lenguaje que compartimos es el cine y el rock", cuenta el profesor Vicente Llorca. "Para mí, so bre todo, la sensación más que de insubordinación es de absurdo, por la distancia entre lo que se supone que debo enseñar y la experiencia diaria de unos chicos que, en algunos casos, provienen de un fracaso escolar total y cuya única expectativa es hacer la mili". La solución para Vicente es echar mano de Jim Morrison o de John Lennon para explicar les lo que es la lírica. "La medida de la situación me la dio una alumna a la que yo un día le contesté que no tenía la culpa de que fuera tan ignorante. 'Yo tampoco la tengo', me contestó", continúa, tras afirmar que ha conseguido llevarse bien con sus alumnos y vencer la frialdad de trato inicial.
"Los padres suelen tener dos actitudes", explica la profesora de filosofía Elvira Sánchez. "A veces te piden ayuda y otras se sienten ofendidos si suspendes a su hijo, porque significa que estás cerrando el futuro a su hijo. Algunas veces pueden ponerse un poco brutos, pero yo no he tenido ningún problema grave", añade.
Antonio Cotallo, presidente de la asociación de padres de un instituto de Moratalaz, en el que tiene una hija de 16 años, opina, por su parte, que una forma de incentivar a los chavales sería propiciar más actividades extraescolares. "Nosotros tenemos algunas trabas para utilizar, por ejemplo, el polideportivo después de las horas lectivas y eso hace que algunos estén en la calle cuando podrían estar haciendo otras cosas".
Entre tanto, los profesores afectados por las agresiones dicen que no se sienten respaldados y temen hablar. En algunos casos, es la propia dirección del centro la que califica el asunto de mera "discusión", aunque haya habido palizas que acabaron en la casa de socorro.
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