El Gobierno prevé implantar tasas o un 'peaje blando' para costear las autovías

El Gobierno prevé la implantación de un sistema general de explotación con peaje blando para la red de autovías o, alternativamente, un sistema general de tarifas por el uso de la infraestructura viaria, aunque el grueso de los recursos correrá a cargo de los Presupuestos Generales del Estado.

Los autores del plan, que tendrá un coste de 18 billones de pesetas, afirman que "hay que propiciar un cambio en la cultura de la financiación incorporando recursos extrapresupuestarios. Los usuarios y otros beneficiarlos no han soportado, en una cuantía significativamente mayor que el resto de los contribuyentes, el coste de las infraestructuras que utilizan", se dice en el capítulo de financiación.Según la tesis sostenida por el ministro de Obras Públicas y Transportes, José Borrell, los autores del Plan Director de Infraestructuras (PDI) señalan que el peso de la financiación de las infraestructuras "ha venido recayendo sobre los contribuyentes".

El Gobierno hace diferencias. "Mientras los usuarios de puertos y aeropuertos -son entes autónomos- han venido corriendo con una parte muy importante de los costes, ésta es muy pequeña en el caso de las infraestructuras viarias e hidráulicas". En el futuro se pretende lograr "una contribución más importante de los usuarios y beneficiarlos en la financiación de las infraestructuras".

En el apartado Desarrollo de la estrategia de financiación por usuarios y beneficiarios se afirma que "se valorará la conveniencia de implantar un sistema de explotación con peaje blando de la red de gran capacidad o, alternativamente, un sistema general de tarifas por ' el uso de la infraestructura viaria".

En cuanto a férrocarriles, "el grueso de la financiación de la red de alta velocidad será de carácter extrapresupuestario". Las redes de puertos y de aeropuertos deben ser autosuficientes en el plano financiero (son organismos autónomos), por lo que no se destinan fondos presupuestarios para la realización de las inversiones previstas.

En el ámbito urbano se buscará una mayor contribución de los beneficiarlos directos de actuaciones en cercanías ferroviarias. "Se valorará la conveniencia de introducir sistemas de peaje blando por el uso de redes viarias de gran capacidad en entornos metropolitanos".

Soporte de desarrollo

El PDI prevé que los Presupuestos del Estado continuarán siendo el soporte de su desarrollo, aunque expone algunas alternativas complementarias. Promoverán la participación de las comunidades autónomas y de los entes locales, así como la financiación "de una parte relevante del plan con cargo a los fondos de cohesión" de la CE.

Los autores del plan señalan que su sistema de financiación "es posibilista en el corto plazo e innovador y abierto a nuevas fórmulas de financiación extrapresupuestaria en el medio y largo plazo".

El plan contempla una inversión de 18 billones de pesetas, de los cuales 12,8 se financiarán con cargo a los Presupuestos del Estado. El transporte interurbano absorbería 10,3 billones; 3,7 billones se destinarían a obras hidráulicas; 450.000 millones a actuaciones en la costa y 3,4 billones distribuidos entre actuaciones para el transporte urbano de Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla-, ría de Bilbao, Málaga y Zaragoza; ejes en Asturias, Alicante- Elche- Alcoy, Pontevedra-Vigo, bahía de Cádiz, La Coruña-Ferrol, Algeciras-La Línea y Granada; 48 en redes viarias en poblaciones medias; 51 en redes arteriales ferroviarias y 43 actuaciones sobre ciudades históricas, periferias, zonas en declive e integración puerto-costa-ciudad.