El Senado de EE UU veta la entrada en el país a los portadores del virus del sida
El Senado norteamericano infligió ayer la primera derrota al presidente Bill Clinton al bloquear un intento de la Casa Blanca para levantar la prohibición de entrada a Estados Unidos de los infectados por el virus del sida. Ésta era una de las promesas electorales de Clinton y una de sus medidas destinadas a evitar, la discriminación de los afectados por esa enfermedad.
El senador republicano Don Nickles, que defendió el bloqueo, afirmó que la entrada de portadores del sida en Estados Unidos incrementaría los casos de contagio de heterosexuales y aumentaría los gastos del Gobierno en más de 100.000 dólares cada año.El presidente había conseguido hace dos semanas que, a pesar de la oposición de la minoría republicana, el Senado diese luz verde a su proyecto para levantar la prohibición a los homosexuales en el Ejército, pero en esta ocasión, con la ayuda de 34 senadores demócratas, la oposición ha conseguido abortar los planes de la Casa Blanca.
Clinton tenía intención de firmar la Ley sobre el Sida cuanto antes, entre otras razones, para resolver la dramática situación en la que se encuentran los 215 refugiados haitianos que permanecen en la base de Guantánamo por ser portadores del virus, pese a tener permiso de emigración para entrar en Estados Unidos. El dirigente negro Jesse Jackson, que mantiene Una campaña en defensa de esos haitianos, ha amenazado con iniciar una huelga de hambre si no se le permite a ese grupo de refugiados la entrada en territorio norteamericano.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.