Solchaga díce que Delors no es quien para hacer juicios sobre la economía española

La insistencia del presidente de la Comisión Europea, el francés Jacques Delors, en resaltar las dificultades de España para poder acceder en 1997 a la Unión Económica y Monetaria (UEM) provocó ayer una contundente réplica por parte del ministro español de Economía. "No es conveniente que altos funcionarios de la CE hagan juicios sobre cosas distintas de las que son sus responsabilidades", dijo Solchaga en Palma de Mallorca. Su respuesta supone un cambio de actitud respecto a la semana pasada, cuando se apresuró a desmentir las primeras declaraciones de Delors sobre la conveniencia de retrasar el ingreso español. Aunque, en su insistencia, hace dos días, el presidente de la CE dijo que pretendía poner "un poco de bálsamo sobre las Hagas" de sus anteriores palabras, su referencia al alto nivel de paro ha provocado una cadena de reacciones. Gobierno y PSOE sostienen que España estará preparada para cuando llegue el momento. El ministro Solbes, sin embargo, matiza que no ingresar en la UEM en 1997 "no sería un drama".

El ministro de Economía y Hacienda, Carlos Solchaga, replicó ayer en Palma de Mallorca a las declaraciones del presidente de la Comisión Europea, Jacques Delors, en las que éste resaltó las dificultades de España para figurar en el grupo de cabeza de la Unión Económica. "No tengo nada que decir respecto a lo que el señor Delors piense sobre si el nivel de paro es muy alto o es muy bajo"."Cada cual", dijo Solchaga en rueda de prensa, "puede tener las opiniones que quiera. El señor Delors conoce menos el mercado de trabajo de lo que lo conocemos los españoles, y sus juicios son menos fundados que los que se pueden hacer dentro del país. Me parece, al margen de estas opiniones, que no es conveniente que altos funcionarios de la Comisión Europea, incluido su presidente, hagan juicios sobre cosas distintas de las que son sus responsabilidades directas: juicios sobre países".

[Jacques Delors declaró el jueves pasado que un país con una tasa de paro próxima al 20%, como es el caso de España, no debería entrar en la UEM en el plazo previsto: 1997. Dicho esto, propuso que siete países, los económicamente más fuertes, se adelanten en la construcción de la Unión Europea y ofrezcan a los otros un periodo transitorio. Una semana antes, Delors había hecho unas declaraciones similares, que luego negó].

Solchaga comentó ayer que sería extremadamente delicado si el presidente de la CE se dedica a hablar hoy del paro en España, mañana de la balanza de pagos en Grecia, y pasado sobre la política del tipo de cambio de la libra esterlina. El ministro añadió que Delors "tendrá muchas dificultades para cumplir su misión, que es, entre otras cosas, coordinar lo que doce países soberanos dicen, porque el poder político en la Comunidad reside en el Consejo de Ministros".Reactivar la construcción

Refiriéndose ya concretamente a la economía española, Solchaga anunció que el Gobierno adoptará, en torno a los meses de marzo o abril, y de manera coordinada con el resto de los países de la CE, un paquete de medidas para reactivar los sectores de la construcción y las pequeñas y medianas empresas (pymes). Estas medidas, que desarrollan los acuerdos de la cumbre de Edimburgo, están encaminadas a corregir algunos de los actuales y graves desequilibrios estructurales de la economía española.

Las medidas serán presentadas simultáneamente en varios países comunitarios para aprovechar "el efecto multiplicador de una iniciativa de crecimiento europea". "Ello", dijo Solchaga, "debe significar una cierta mejora en la situación de la demanda interna. No diré yo que un cambio inmediato, pero sí una mejora que se pueda percibir". En este sentido, opinó que no es previsible que la recuperación de la actividad económica llegue antes de la segunda mitad de 1993. También indicó que pese al fuerte aumento del desempleo, no faltará dinero para abonar las pensiones ni habrá este año una nueva reforma del INEM, aunque sí anunció medidas de carácter financiero para "responder al pago de los subsidios y de las prestaciones".Solbes: "No es un drama"

Previamente a las declaraciones de Solchaga, el ministro de Agricultura, Pedro Solbes, manifestó ayer que no estar integrados en la primera velocidad de la Unión Económica y Monetaria (UEM), prevista para 1997, "no es un drama". "Lo importante", dijo, "es que España ha cogido una velocidad de crucero suficientemente importante para aproximarse a las economías comunitarias y debemos seguir manteniendo este esfuerzo".

"España", declaró el ministro en Onda Cero, "tiene que hacer un esfuerzo si quiere estar, y eso es lo que pretende el Gobierno. Hagamos el esfuerzo que representa el Plan de Convergencia e intentemos estar".

El titular de Agricultura añadió que el nivel de paro no está incluido en los indicadores establecidos para la convergencia europea, pero admitió: "No nos equivoquemos, es verdad que aunque no esté, el paro refleja la situación de una economía".

Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores, Javier Solana, manifestó en Pekín que las declaraciones de Delors hay que interpretarlas en el sentido de que debe darse más importancia al empleo en el plan de convergencia, cuestión que él comparte.

Las declaraciones de Delors han sido criticadas por los responsables empresariales españoles y aplaudidas por los dirigentes sindicales. Cristóbal Montoro, director del Instituto de Estudios Económicos, las ha calificado de "no muy acertadas". En su opinión, está demostrado que la tasa de paro ha aumentado en España porque se han incumplido las condiciones de convergencia. El responsable del departamento de economía de la CEOE, José Folgado, no comparte la opinión de Delors de incluir la tasa de paro en los criterios de la convergencia. UGT y CC OO afirman que las alusiones de Delors al paro ratifican el fracaso del Gobierno.