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Luis Gordillo: "El color se convierte por sí solo en el protagonista de los cuadros"

El pintor sevillano expone en la galería Marlborough de Madrid sus últimos trabajos

Rocío García

"El color no es un adjetivo, sino un sustantivo. Es un instrumento del lenguaje, un concepto, un protagonista, casi un objeto. El color es un personaje lleno de significados". De esta manera presentó ayer el pintor sevillano Luis Gordillo sus trabajos de los dos últimos años que expone desde hoy y hasta el próximo 13 de marzo en la galería Marlborough de Madrid (Orrila, S). La muestra, en la que destaca la luminosidad y vitalidad de los cuadros en contraposición con el estado melancólico en el que afirma vivir Gordillo, fue expuesta casi en su totalidad el pasado mes de diciembre en Nueva York.

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A sus 58 años, a Gordillo le ha abandonado el color ocre -en realidad, yo no lo abandono, desapareció"-, que utilizó en sus anteriores trabajos, para sumergirse de lleno en el verde azul y verde tabaco. "Para mí, el color es una música especial, un complejo de significados y contenidos. El color se convierte por sí solo en el protagonista absoluto de los cuadros", señaló ayer el pintor, quien rechazó que la luminosidad de los verdes tenga nada que ver con su estado anímico. Es más, Gordillo afirmó no sentirse para nada identificado ni reconocerse en los trabajos expuestos. "Cuando miro estos cuadros, me extraña que yo haya podido hacer esto. Mira que hay líos, vitalidad y actividad en ellos, cuando yo soy persona sin energía que tiendo a la melancolía y a la depresión. Hay una persona en mí que no conozco, y que, por supuesto, es más optimista", afirmó divertido.Es un pintor que fotografía todo el proceso de sus obras, de tal manera que lo que se esconde a largo de su creación lo retiene en papel. "Hay ideas que están ocultas en un cuadro que pueden ser el inicio de otro", dice Gordillo. "Mis cuadros tienen un carácter genetista. Hay una unidad inicial que va generando un cuerpo y a través de un largo proceso de asimilación de nuevos componentes se convierte en el cuadro final"."¿Y no me van a preguntar cómo me ha ido en Nueva York", reclamó extrañado Gordillo, tras su primera exposición individual en Estados Unidos, el pasado mes de diciembre. "Pues las críticas han sido muy buenas, aunque no tanto el resultado económico", contestó raudo. A su entusiasmo neoyorquino se viene a sumar el encuentro con un grupo de pintores americanos de la generación de los cuarenta -Linda Donald, Jonatan Lasker, D. Reed, Larry Pittman-, cuya pintura se califica de "abstracción pop" y con la que se siente plenamente identificado. "En España y en Europa me encuentro solo estéticamente".

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