Croacia drena la presa de Peruca para evitar un desastre humano y ecológico en el sur del país
Croacia trataba ayer de impedir un desastre humano y ecológico tras la ocupación, el jueves, por sus tropa! de la presa y la central hidroeléctrica de Peruca, a 30 kilómetros al norte de Split. Los ingenieros croatas intentaban drenar parte de los 540 millones de metros cúbicos de agua que contiene el embalse para reducir la presión sobre el muro de 65 metros de altura, en donde se han producido graves daños a causa de los combates. Los Gobiernos de Zagreb y Belgrado difundieron informaciones contradictorias sobre la presa. Los serbios y los croatas se acusan mutuamente de ser los causantes del daño.
El desastre potencial hizo pasar ayer a segundo plano los combates en Krajina, la región croata habitada por serbios bajo supervisión de los cascos azules de la ONU. Las autoridades croatas se apresuraron a enviar convoyes con camiones cargados de grava. La presa está situada en una zona montañosa, y sus reservas de agua se extienden a lo largo de 18 kilómetros, coronando un fértil valle.Un equipo de tres ingenieros británicos saldrán hoy a Croacia para cooperar con los expertos locales en la reparación de la presa. El envío de los ingenieros responde a una petición del Gobierno croata. El colapso del dique inundaría más de 20 poblaciones con unas 20.000 personas. Habitantes de Rumina, una de las poblaciones afectadas, dijeron que los niveles de agua del río local estaban aumentando rápidamente y se preparaban para evacuar la zona tan pronto sonasen las sirenas. Las aguas del Cetina que fluyen desde la presa claras y limpias, se han convertido en una corriente de lodo de color rojizo.
El científico Tonci Caracic, que trabaja en la oficina de salud pública de Split, aseguró que los ingenieros y técnicos croatas estaban preparando un drenaje controlado del embalse para reducir la presión del agua almacenada sobre el dique.
El Gobierno croata denunció ayer que los serbios hicieron detonar tres minas de las utilizadas para la demolición de grandes estructuras, dos en los extremos del dique y otra en el centro, cuando se retiraron, el jueves, ante el avance de las tropas croatas.
Mientras, las fuerzas irregulares serbias difundían que la presa resultó dañada por el fuego artillero croata. El coronel serbio Stojan. Spanovic aseguró ayer que sus fuerzas habían anunciado el acatamiento de un alto el fuego para facilitar los trabajos de reparación.
El primer ministro de Croacia, Hrvoje Sarinic, visitó ayer las instalaciones y afirmó que Zagreb había pedido ayuda a los expertos de las Naciones Unidas para controlar la situación y determinar la autoría de los daños.
Por su parte, las fuerzas de la ONU indicaron que sus técnicos han examinado la presa y no ven peligro inminente sobre el posible colapso del dique. Sarinic también aseguró que no hay peligro de derrumbamiento. "Los daños sufridos son importantes, pero reparables".
Los daños fueron fácilmente observados por un periodista de Reuter durante una visita a la presa con soldados croatas. Un enorme cráter cerca de una de las compuertas situadas en un extremo del dique liberaba gran cantidad de agua. El paso que corona el dique (450 metros de largo) sufre también importantes daños.
En la planta de turbinas, las compuertas fueron destruidas por los disparos de artillería, lo mismo que la sala de operaciones, dentro de la cual tan sólo había un amasijo de hierros retorcidos y hormigón. Los efectos de la feroz batalla librada entre croatas y serbios el miércoles y el jueves se veían por todas partes.
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