Las administraciones sólo garantizan la continuidad del Consorcio de Realojamientos durante seis meses

Seis meses de prórroga y reflexión; después, veremos. Esta fue la conclusión a que llegaron ayer el Ayuntamiento de Madrid, la Comunidad y la Delegación del Gobierno sobre el futuro del Consorcio para el Realojamiento de la Población Marginada, durante una sesión del consejo rector de este organismo.El Consorcio, creado en 1986 para dar vivienda y apoyo social a 2.670 familias chabolistas, gitanas en su mayoría, tiene garantizados seis meses de existencia. En febrero y marzo, una comisión de técnicos de las tres instituciones analizará el trabajo que realiza este organismo, su situación económica y si interesa o no su continuidad. Aún quedan 1.092 familias pendientes de realojamiento.

Estas indagaciones llevarán a los Gobiernos regional y local a decidir si aportan presupuesto para renovar el convenio de colaboración firmado en 1988, que caduca en junio. Las administraciones creen necesario el análisis porque "la situación sociológica de los chabolistas es muy diferente ahora que en 1986, o en 1988".

José Luis Gómez, gerente del Consorcio, puso un ejemplo de este cambio: "El desarrollo y nivel de integración vecinal de los realojamientos que hicimos en 1988, como Plata y Castañar (Villaverde) y el Cañaveral (Vicálvaro), no tiene nada que ver con actuaciones posteriores, como las de este año en La Quinta (Fuencarral) y La Rosilla (Vallecas), que dos meses marchan bien y luego se descontrolan [en clara alusión al fuerte tráfico de drogas]".

El Consorcio tiene previsto continuar las obras en los poblados de Jauja (Latina) y La Celsa e iniciar dos nuevos. Existe también el compromiso de mantener la plantilla de trabajadores.