Los vecinos opinarán sobre la reforma de la plaza de Oriente sin ver los planos

El Ayuntamiento de Madrid va a sacar a información pública, antes de que acabe este mes, los trámites urbanísticos para la reforma de la plaza de Oriente, pero no va a someter a la opinión de los vecinos el proyecto del arquitecto Miguel de Oriol. Sin embargo, el visto bueno definitivo a la construcción de un paso inferior -con dos niveles de tráfico- y dos plantas de aparcamientos, para autocares y turismos, tiene que darlo el Gobierno regional.

"Estoy seguro de que llegaremos a un acuerdo con la Comunidad", afirmaba ayer con optimismo el director de Obras del Ayuntamiento, Luis Armada. Los 400 millones presupuestados y la mayoría del Partido Popular en el ConsIstorio permiten, en teoría, que la reforma de la plaza de Oriente arranque este año.El responsable del departamento de Obras puntualiza: "No está contemplado que el proyecto se someta a información pública, ya que la legislación sólo obliga a hacerlo -por un periodo de dos meses- con la tramitación de la modificación puntual del Plan General". El Ayuntamiento, sin embargo, sí que ha expuesto maquetas y proyectos, como los del paso inferior de la plaza del Conde de Casal, para consultar a los ciudadanos.

Esta postura contrasta con la de Izquierda Unida, que ha anunciado la convocatoria de un referéndum entre los vecinos del centro de la ciudad para que expresen su parecer sobre la reforma de la plaza de Oriente. Por su parte, Armada subraya que las grandes líneas del proyecto de Oriol han sido consultadas con el arquitecto Fernando Chueca Goitia, director de las obras de la cercana catedral de la Almudena, y con Miembros de la Academia de Bellas Artes.

Jardines protegidos

El Ayuntamiento sostiene que la construcción de un aparcamiento subterráneo no acarrea necesariamente la revisión del planeamiento de una zona de la ciudad, pero admite que los espacios verdes de la plaza de Oriente poseen, como jardines históricos, una protección urbanística especial.

El coste total de las obras se cifra en unos 5.000 millones de pesetas, de los que el 60% procederán de las arcas municipales. Los 2.000 millones restantes deberán salir del concesionario que gestione las plazas de aparcamiento privado.

El proyecto de Oriol, sometido a constantes revisiones, incluye en su última versión un paso inferior bajo la calle de Bailén. El director municipal de Obras aseguró ayer que el túnel dispondrá de dos pisos o secciones a distinto nivel: la inferior atravesará la plaza de Oriente, que quedará reservada a los peatones, y la superior se integrará en la red de calles subterráneas que circunda la primera planta de aparcamientos y desemboca en los laterales del teatro Real.

El primer nivel de estacionamiento se destina a dársenas para 90 autobuses privados y de cinco líneas de la EMT. En su interior se abrirá una galería de servicios y comercios de 4.000 metros cuadradados. La segunda planta, que también estará conectada -entrada y salida- con las rampas del paso inferior, acogerá unas 700 plazas de turismos, la mitad, al menos, para residentes en la zona.