El Ayuntamiento de Santa Cruz embarga al Tenerife

El Ayuntamiento de Santa Cruz ha embargado la cuenta corriente del Tenerife en la Caja General de Ahorros de Canarias por un importe superior a los 22 millones de pesetas como parte de una deuda contraída por este club entre 1987 y 1991 por tasas e impuestos municipales y que se eleva a unos 40 millones.La medida, que fue hecha efectiva el pasado jueves, ha causado desde entonces un duro enfrentamiento entre el presidente del club, Javier Pérez, y el alcalde de la ciudad donde está radicada la sede de este equipo de la Primera División de fútbol, José Emilio García. "Ha sido un atropello, un ataque y un atentado contra los intereses del Tenerife, algo sin precedentes", declaró el primero. "El Tenerife tiene que cumplir con sus deberes municipales y yo no estoy dispuesto a parar un procedimiento que había entrado en la vía de recaudación ejecutiva porque eso sería una alcaldada", manifestó a su vez el segundo, que es miembro de una fuerza política nacionalista, la Agrupación Tinerfeña de Independientes (ATI-AIC).

Pacto verbal roto

En una nota oficial del consejo de administración del club se afirma que el alcalde ha actuado "despreciando e incumpliendo su propia palabra anterior". Pérez informó que hace seis meses había llegado a un pacto verbal con García por el que éste accedía a cobrar la deuda del Tenerife de manera fraccionada, entre 1991 y 1999, a medida que la Liga del Fútbol Profesional (LFP) fuera liquidando las cantidades correspondientes dentro del plan de saneamiento. Según el presidente del Tenerife, incluso el Ayuntamiento se comprometía a devolver estos ingresos al club en concepto de subvenciones para el fomento del deporte de base.El alcalde confirmó esta fórmula de pago, pero responsabilizó al Tenerife de haber dejado pasar el tiempo sin concretar su propuesta por escrito y justificó el embargo como un paso inevitable de la recaudación ejecutiva municipal. No obstante, el vicepresidente económico del club, Adelardo de la Calle, aseguró que García intervino en septiembre de 1991 para detener una primera notificación del mismo.

El Ayuntamiento de Santa Cruz, que atraviesa una precaria situación económica, ha cumplido ahora su aviso y se ha cobrado de la cuenta corriente del Tenerife 22.405.822 pesetas, cantidad que corresponde a una parte de la deuda por impuestos de radicación y basura. El Tenerife, que había depositado en vano un aval para garantizar este pago, cerrará con toda probabilidad su ejercicio con ese déficit.